La KKU Nong Khai Fair es una feria que se organiza entre varias universidades de Tailandia, con el fin de que los alumnos compitan en diferentes áreas; este año hubo un torneo de videojuegos, donde un grupo de monjes budistas se llevó el primer lugar.
Estos 4 jóvenes pertenecen a la Balee Sathit Suksa, una escuela dedicada a la práctica del budismo. Sin embargo, también reciben materias alejadas de la religión, como informática, fue en esta donde se enteraron de la competencia del juego móvil Speed Drifters.
Con esto, decidieron que sería buena idea participar, con el fin de medir sus habilidades y para tener un poco de diversión; el coordinador de la competencia, Kokkiad Chaisamchareonlap, pensó que sería buena idea, aunque nunca imaginó que ganarían.
Algunos vieron mal la participación de monjes budistas en un torneo de videojuegos
No obstante, la participación de estos monjes budistas en un torneo de videojuegos no estuvo exenta de cierta polémica. Algunos alumnos, asistentes y organizadores de otras escuelas pensaron que era “inapropiado” que llevaran sus túnicas a la competencia.
Hubo otros que incluso criticaron que ellos jugaran videojuegos, teniendo en mente el estereotipo de esta religión que se basa en el ascetismo y el alejamiento de cualquier cosa material o mundana, como los interactivos.
Al respecto, Kokkiad Chaisamchareonlap señaló que dejaron que los jóvenes participaran porque muchos de ellos son de hogares rotos o tienen historias de situación de calle; por lo que en realidad nunca han tenido nada en su vida.
Hay que mencionar que Kokkiad también es monje y cree que las nuevas tecnologías e intereses un tanto “opuestos” a la práctica del budismo, no están peleados con la religión en sí misma; siempre y cuando las enseñanzas se sigan de manera puntual.
Con información de SDP noticias