Treinta premios Nobel de la Paz exigieron a los países que están en guerra contra las drogas evaluar el impacto de la estrategia global y, de no tener resultados satisfactorios, replantearla por una más innovadora.
Durante la clausura de los trabajos de la 17 cumbre mundial celebrada en Mérida, Yucatán, llamaron a tratar las adicciones como un problema de salud pública y no como un delito.
Leymah Gbowee, laureada en 2011, expresó en las conclusiones del encuentro: “Hacemos un llamado a realizar estudios científicos para evaluar el impacto de la guerra contra las drogas, el tráfico y los niveles de uso de las mismas.
“Que se revisen estrategias innovadoras con el fin de combatir la crisis de las drogas, como aquellas que han sido implementadas en varias jurisdicciones estatales y nacionales con el fin de reducir y legalizar su uso”.
La activista liberiana destacó la necesidad de reparar el daño a las víctimas de violencia sexual y muerte por parte del crimen organizado, y que “se apoye un nuevo enfoque a la crisis global tratando el problema de la adicción como un tema de salud y no un delito. Todos debemos cubrir el papel de la sociedad civil”.
Asimismo, urgió a replantear el concepto de paz, toda vez que se considera, de manera equivocada, como “la ausencia de guerra”, cuando en realidad “es coartar las libertades básicas de las personas. Debemos dejar una huella por la paz en el mundo, construir un mundo pacífico y justo”.
A nombre de sus compañeros, Gbowee pidió rechazar el populismo y siempre velar por el estado de derecho dentro de todas las naciones, además de apoyar el desarme nuclear, tener redes sociales más responsables, medios de comunicación más democráticos y críticos, y estrategias que mitiguen el cambio climático.
RECONOCIMIENTO AL ESTADO
El gobernador de Yucatán, Mauricio Vila Dosal, recibió de la presidenta del secretariado de la cumbre, Ekaterina Zagladina, el premio Estado de la Paz, por su labor en el desarrollo social, cultural y económico de la entidad.
En su discurso aseguró que el reconocimiento no es un logro de gobierno, sino de todos los yucatecos, y resaltó que este encuentro rompió récord tanto en presencia de galardonados como en público.
“Ellos son gente común y corriente, pero tiene una voluntad extraordinaria: no se quedan callados ante la injusticia. Ellos dan todo por la igualdad, por proteger las libertades y derechos sociales, son un gran ejemplo”, aseveró.
El mandatario estatal se pronunció por que cada yucateco, cada mexicano, realice pequeñas acciones positivas y así, en cadena, crear grandes acciones en beneficio de toda la sociedad.
En tanto, Zagladina reconoció al gobierno del estado y a su gente por ser excelentes anfitriones y por la calidez con la que los recibieron.
RICKY MARTIN PIDE IGUALDAD
En su intervención, el cantante Ricky Martin afirmó que la comunidad LGBT no quiere más derechos sociales, quiere igualdad, “es muy simple”. Tras recibir el premio de La Paz por parte de Ekaterina Zagladina aseguró que vivir libremente debe ser respetado.
“Mi comunidad LGBT, quienes a pesar de sus grandes talentos, de sus significativas aportaciones a la humanidad, forjadores de extraordinarias iniciativas para soluciones transformadoras con beneficios colectivos, siguen siendo objeto del rechazo y de las absurdas creencias producto de los prejuicios y el desconocimiento, ignorancia.
“La igualdad, el respeto y la tolerancia tienen que ser parte de nuestra vida, el derecho de cada ser humano a vivir libremente tiene que ser respetado. Hay lugar para todos, pero para lograr la paz tenemos que luchar por nuestro derecho a vivir en libertad.
“Como miembro de la comunidad LGBT es muy sencillo: no pedimos más derechos que el resto de los ciudadanos, tampoco queremos tener menos, simplemente queremos igualdad, es muy simple”, refirió.
El boricua solicitó a todos los activistas y defensores de derechos humanos no darse por vencidos y seguir dando pasos firmes, porque “su trabajo será vital para que las próximas generaciones tengan paz”.
Con información de Milenio