La Organización de las Naciones Unidas (ONU) sufre su peor crisis de efectivo en casi una década y corre el riesgo de agotar sus reservas de liquidez a finales de octubre, alertó el secretario general, Antonio Guterres.
El agotamiento de las reservas de liquidez de la ONU podría obstaculizar el pago del personal y los proveedores. A finales de septiembre la ONU solo había recibido el 70 por ciento de las contribuciones correspondientes al presupuesto ordinario, en comparación con el 78 por ciento recibido durante el mismo periodo de 2018, dijo el portavoz de Guterres, Stéphane Dujarric.
Dujarric agradeció a los 129 países que pagaron puntualmente sus cuotas, pero instó a los 64 restantes a efectuar sus pagos “con urgencia y en su totalidad”.
Ante esta delicada situación financiera, Dujarric indico que desde inicios de año Naciones Unidas tuvieron que tomar múltiples medidas “para ajustar los gastos con las entradas de efectivo”, de acuerdo con un comunicado de la organización.
“De no haberse contenido los gastos a nivel mundial desde principios de año, el déficit de tesorería en octubre podría haber alcanzado los 600 millones de dólares y la organización no hubiera dispuesto de la liquidez necesaria para sufragar la apertura del debate de la Asamblea General y las reuniones de alto nivel del mes pasado. Hasta la fecha, hemos evitado interrupciones importantes en nuestras operaciones”, destacó Dujarric.
A consecuencia de ello indicó que estas medidas “ya no son suficientes” y que es Secretariado de la ONU podría verse se obligado afrontar “un impago de los sueldos y los pagos de bienes y servicios a finales de noviembre, a menos que más Estados Miembros paguen íntegramente sus cuotas presupuestarias”.
Entre las medidas adicionales que Guterres ha pedido que se adopten de inmediato para contener la situación figuran la reducción de viajes oficiales, posponer el gasto en bienes y servicios y la suspensión de las actividades programadas fuera del horario oficial de reuniones.
Con información de Aristegui noticias