En un nuevo capítulo de “Me Convertí en Millonario de la Noche a la Mañana”, llega la increíble historia de una viejita en Francia que durante años tuvo en su casa una pintura medieval del primer maestro italiano Cimabue sin darse cuenta. La pintura pasó completamente desapercibida hasta que la pequeña obra titulada “La Burla de Cristo” fue encontrada este verano colgada sobre la estufa de su cocina. Hoy, la venta de esta obra, la ha convertido en una nueva multimillonaria.
En un principio, se estimó que la pintura de Cimabue se iba a vender entre unos $6.6 y $8.8 millones de dólares (bastante buenos si no los tenías considerados en tus planes), pero al parecer, la obra es mucho más importante de lo que muchos creyeron. En una guerra de ofertas en la casa de subastas al norte de París, el precio se disparó mientras los coleccionistas luchaban por asegurar la pintura perdida de finales del siglo XIII. Al final del día, “La Burla de Cristo” se vendió por $26.8 millones de dólares con honorarios.
Así de lo más casual, la pintura resultó ser la pieza faltante de un retablo que representa ocho escenas de la Pasión de Cristo, según Eric Turquin, el experto con sede en París que autenticó la obra. El retablo también incluye la “Flagelación de Cristo” de Cimabue, que ahora se encuentra en la Colección Frick en Nueva York, y “La Virgen y el niño con dos ángeles” en la Galería Nacional de Londres. Turquin dijo que la entrevista generó interés de “los museos más importantes de todo el mundo”.
El hombre que se llevó la obra es el concesionario de con sede en Londres Fabrizio Moretti, que actuaba como representante de un par de coleccionistas (con mucho billete). “Es uno de los descubrimientos más importantes del Viejo Maestro en los últimos 15 años“, le dijo Moretti al New York Times en una entrevista. En un comunicado, el subastador y director del Grupo Actéon, Dominique Le Coënt dijo: “Este registro muestra que hoy, una obra de arte se puede vender en cualquier parte del mundo gracias especialmente a plataformas poderosas como (el sitio web de subastas) Interencheres“.
En esta historia parece que todos salieron muy contentos: tanto los que armaron la subasta, los que compraron la pintura, los amantes del arte, y sobre todo, la mujer francesa que se acaba de empacar casi 27 millones de dólares a la bolsa. No cabe duda que este mundo es un lugar muy loco en el que puede pasar cualquier cosa. Así que la próxima vez que vayas a casa de tu abuelita, échale un ojo a sus pinturas viejitas, no vaya a ser que de pura casualidad tenga ahí colgados casi 50 millones de pesos.
Con información de Sopitas