Halloween es sinónimo de fiesta del miedo, llamativos trajes terroríficos y, si pensamos en los niños, de golosinas en cantidad.
El consumo de estos productos crece de manera exponencial en estas fechas, lo cual tiene diversas implicaciones. En esta nota te explicaremos cuáles son las que más se consumen y cuáles son sus principales afectaciones en la salud de nuestro organismo.
Los dulces son los productos insignia de Halloween. Consumidos tanto por chicos y grandes, estos alimentos de escaso valor nutricional pueden causar mayores perjuicios al organismo que los grasoso puesto que su alto contenido de azúcar facilita la acumulación de tejido adiposo.
Además, el azúcar hace que las bacterias que se encuentran en la boca formen ácidos que dañan y debilitan los dientes, por lo que, sumado a una mala higiene bucal, termina siendo el principal causante de caries.
Entre las golosinas más consumidas en Halloween y dañinas para nuestros dientes se encuentran las populares gomitas, las cuales se adhieren a las paredes de las muelas, y las golosinas de chupar. Estas últimas producen acumulación de azúcar en toda la saliva y pueden derivar, en casos extremos, en la desviación de la mandíbula por el movimiento anormal que esta hace para succionarlos.
El consumo excesivo de golosinas, más aún si son de dudosa procedencia, también afectan la salud estomacal: pueden provocar cólicos, episodios de diarrea y vómitos
Llegando a un extremo, si se vuelven adictivos, pueden ser causantes de obesidad y predisponer a la aparición de la diabetes tipo 2.
Además, los diversos componentes de los productos golosinarios, como acidulantes, antiespumantes y colorantes, pueden tener efectos negativos en el sistema inmunológico, más aún si son de dudosa procedencia.
La mejor manera de evitar estos efectos perjudiciales para la salud es dejando de consumir golosinas, pero, si en caso la fiesta de Halloween te dificulta evitar su consumo, recuerda que debes cepillarte los dientes después de ingerirlas, en especial si son gomitas.
También puedes comer otros alimentos para fomentar la formación de saliva, ya que esta se encarga de eliminar los restos de azúcar en la boca.
Además, es importante estar atentos a la información brindada en los rótulos de estos productos y verificar que cuenten con registros sanitarios, puesto que muchos de las golosinas que se comercializan en Halloween suelen tener un origen dudoso y resultan siendo tóxicos para el organismo.
Con información de La República