Unos 5,8 millones de bolivianos ven interrumpidos hoy los beneficios del Sistema Único de Salud (SUS), tras el golpe de Estado, situación agravada con el retiro forzoso de los médicos cubanos del país andino.
Según fuentes oficiales de salud del Gobierno depuesto ‘El SUS comprendía la implementación de un sistema universal, público y gratuito para el acceso al sistema de salud de las personas que no contaban con ningún tipo de seguro médico’.
Hasta el inicio de su implementación en marzo pasado, más del 50 por ciento de la población boliviana carecía de cobertura de salud y de un seguro.
El sector médico privado boliviano siempre se opuso a la premisa del gobierno de Evo Morales de que ‘la medicina estatal tenía que ser mejor que la privada’, sostienen autoridades depuestas.
Morales implementó el SUS, uno de los más importantes programas sociales de su gestión, para beneficiar a quienes carecían de seguro médico o dinero para pagar las altas cuotas impuestas por los servicios que brinda el sector privado.
La iniciativa promulgada en ley desde el 20 de febrero pasado fue acogida a partir del 1 de marzo con inscripciones ciudadanas y la propuesta de implementación gradual para los próximos cinco años, proyecto truncado por el actual golpe de Estado contra el primer presidente indígena de Bolivia.
Una inversión de 200 millones de dólares fue garantizada para fortalecer los recursos humanos y el equipamiento del proyecto SUS que contó de modo inicial con más de tres mil centros de salud de primer, segundo y tercer nivel.
Los ciudadanos recibían una valoración médica desde su suscripción al SUS y así se determinaba si era necesario derivarle hacia alguna especialidad, un proyecto basado en la experiencia de 13 años implementada por los galenos cubanos en el país altiplánico.
La colaboración médica antillana salvó aquí más de 110 mil vidas como fruto del acuerdo firmado en 2005 por el entonces presidente Evo Morales y el líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro.
Además del envío de contingentes sanitarios, equipamiento médico y asistencia general gratuita, que generó molestia en el sector de atención de salud privada, Cuba otorgó unas cinco mil becas a jóvenes bolivianos para estudiar en Escuela Latinoamericana de Medicina de La Habana.
De forma gratuita alrededor de 700 mil ciudadanos fueron beneficiados en este Estado Plurinacional con cirugías para mejorar o recobrar su visión, intervenciones antes subsidiadas por el Gobierno de Morales y la Alianza Bolivariana para los Pueblos de nuestra América.
Datos oficiales consignan que una de las operaciones más comunes, la de cataratas, ronda los mil dólares en cualquier institución privada.