Un bebé de 23 meses murió al entrar a su casa en llamas para intentar rescatar a su perrito. El incendio en la casa de la familia Sharp ocurrió el sábado por la noche en Arkansas, Estados Unidos. Los padres del menor lograron salir a tiempo con él en brazos, pero en un ligero descuido por parte del matrimonio, el bebé regresó al interior de la casa para buscar a su mascota, un perrito de 6 meses.
Los padres no pudieron hacer nada hasta que los bomberos lograron apagar las llamas y encontraron los cuerpos sin vida de Loki Sharp y su perrito abrazados, con el animal rodeando el cuerpo del bebé como si hubiera intentado protegerlo del fuego, tal como informó el jefe de bomberos de Gentry, Vester Cripps.
“Vuela alto bebé, eres profundamente extrañado y amado”, publicó este lunes el padre de Loki, Kurtis Sharp. “Sabemos cuál es tu nuevo hogar y nos destruye que te fueras tan pronto. Pero mamá y papá, y todos tus hermanos y familia, te quieren mucho”, agregó.
Los amigos y familiares de la pareja han intentado recaudar fondos para cubrir los gastos del funeral de Loki y conseguir una nueva casa para el matrimonio, que perdió todo en el incendio, que se cree fue provocado por un cortocircuito.
“No solo perdieron sus pertenencias sino también un niño precioso”, dice la descripción de un evento de recaudación de fondos en Facebook.
“Necesitamos todas las donaciones que podamos obtener. Lo que sea que tu corazón pueda entregar. Lo último que queremos es que la familia se preocupe del dinero durante este momento tan difícil”.
La madre del menor escribió: “Solo quiero parar aquí. Aprecia cada momento que estés con tus hijos. ¡Te amamos Loki y sabemos que estás en un lugar mejor!”.
Con información de Milenio