Una frase importante que muchos psicólogos comparten es la de “infancia es destino” y de acuerdo con un reciente estudio, tienen mucha razón.
De acuerdo con una investigación del National Council of Juvenile and Family Court Judges las experiencias traumáticas de la infancia podrían causar efectos adversos en la adultez.
Al respecto. la encuesta Adverse Childhood Experiences, los adultos que tuvieron traumas infantiles son más propensos a desarrollar problemas médicos, psicológicos o ambos.
Entre las experiencias traumáticas está el abuso físico, agresiones verbales, abuso sexual, negligencia psicológica y carencias emocionales; así como situaciones de adicción en la familia, violencia doméstica, miembros encarcelados, padecimientos mentales, divorcio o abandono.
Estos son los problemas más comunes que dejan los traumas de la infancia
De acuerdo con el cuestionario ACES, las experiencias infantiles traumáticas pueden dar paso a comportamientos como de ansiedad, depresión o adicción.
En gran medida, las personas en edad adulta tienden a desarrollar una adicción al cigarro, ser obesos, experimentar ansiedad, tener ataques de pánicos, depresión, comportamientos promiscuos, relaciones sexuales en edad poco adecuada, problemas de alcoholismo y uso de drogas.
“En el estudio encontramos que los traumas infantiles son muy comunes en todas las razas y estratos sociales. Muy frecuentemente no se identifica ni se atiende, lo que se puede relacionar con problemas en la edad adulta”, destacan.
Con información de Radio Fórmula