El Tren Maya tendrá, hasta ahora, 18 estaciones en cinco entidades del país, según el último trazo dado a conocer por Fonatur.
El mapa señala que ahora en Quintana Roo se encontrarán ocho estaciones: Cobá, Cancún, Puerto Morelos, Playa del Carmen, Tulum, Felipe Carrillo Puerto, Bacalar y Chetumal.
En tanto que en Tabasco serán dos las paradas del tren, una en Tenosique, como se había planteado originalmente, y una segunda en Balancán, que no se encontraba en el trazo original ni en el mapa de polos de desarrollo dado a conocer por Fonatur en el primer semestre del año.
En este trazo destaca además que no se contempla el trazo del tren eléctrico al interior de Calakmul, a la vez que la estación más próxima se ubicará en la cabecera de ese municipio, en Xpujil, a más de 50 kilómetros de Conhuas, a la entrada del sitio arqueológico.
A ellas se suman las estaciones de Mérida, Izamal, Chichén Itza y Valladolid en Yucatán; Campeche, Escárcega y Xpujil en Campeche; y Palenque en Chiapas.
A mediados de año, el director de Fonatur, Rogelio Jiménez Pons, anunció que la ruta original se modificaría para sumar a Cobá y acortar el recorrido de más de 1,500 km a 1,460 km, con lo que pasaba además de 15 a 16 paradas.
Durante 2019 se realizaron diversos foros de discusión sobre el Tren Maya con gobiernos estatales y locales de las cinco entidades que alojarán el proyecto.
En ellos los mandatarios de Campeche, Yucatán y Quintana Roo llamaron en repetidas ocasiones a aumentar el número de paradas en sus respectivos territorios en puntos como Seybaplaya, Uxmal y Progreso y Chetumal, respectivamente. Sólo la capital quintanarroense fue tomada en cuenta.
Hasta ahora, el estimado de inversión pública para ejecutar el proyecto se ha mantenido en un rango de entre 120,000 y 150,000 millones de pesos; sin embargo, el mandatario mencionó que podría alcanzar los 200,000 mdp.
En contraste, al anunciar el proyecto, el gobierno federal dijo que la aportación pública sería de 10% del total de la obra; mientras que en noviembre pasado, Jiménez Pons ajustó esa cifra a un 70%.
Además, las primeras licitaciones del Tren Maya que se lanzarían a finales de este año fueron pospuestas para los primeros meses de 2020.
Con información de Forbes