La Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM) entregó a la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, un informe sobre la violencia hacia niñas, niños y adolescentes en 2019, acompañado de una propuesta para crear una estrategia a nivel nacional para atender esta problemática.
El director de REDIM, Juan Martín Pérez García, propuso sumar una nueva estrategia a los 25 proyectos prioritarios del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, que esté enfocada a prevenir y atender a nivel nacional la violencia armada contra niños, niñas y adolescentes.
“Encontramos con mucha preocupación que al no quedar los niños, niñas y adolescentes entre los 25 proyectos estratégicos que presentó el presidente como su legado de sexenio, pues esto ha significado invisibilidad y literalmente desprecio a sus derechos”, afirmó.
Al quedar este grupo de la población excluido de los proyectos prioritarios, eso también implicó que los recortes presupuestales fueran “parejos”, lo que ha llevado a que niños con cáncer se queden sin sus tratamientos, o a que se cierren estancias infantiles, y que no haya recursos suficientes para atender a la niñez migrante, aseguró Pérez García.
Al respecto, criticó que la actual administración haya ignorado el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA), pues este es el mecanismo a través del cual se debería de haber coordinado la política pública para atender a este sector de la población.
Para Pérez García “el corazón” de la violencia contra la niñez que, según registros de REDIM aumentó considerablemente el año pasado, está en que la actual estrategia de seguridad está basada en la militarización.
“Tenemos clarísimo qué tendrá que seguir el Ejército y la Marina, tenemos clarísimo qué se tiene que seguir combatiendo, pero no podemos apostar a que ese va a ser el tema como se está tristemente pensando que la Guardia Nacional va a resolver el crimen, migración, feminicidios (…) no puede ser esta cultura porque nos vamos a convertir paulatinamente en una sociedad militarizada”, señaló.
Por ello, instó a cambiar la forma en que se hace frente a la violencia en el país y buscar otras alternativas en las que los niños, niñas y adolescentes dejen de ser víctimas directas, por ejemplo, con investigaciones de carácter fiscal y vinculando a los funcionarios que actúan en complicidad con grupos criminales.
En ese sentido, afirmó que la principal forma de lograr un cambio es cumpliendo la ley y respetando las instituciones.
“El gran problema que tiene este país es que tiene leyes maravillosas y firmamos todos acuerdos internacionales, se escriben cosas muy bonitas, pero todo es papel mojado”, dijo.
Con información de Excélsior