Dos policías municipales de Silao y dos civiles murieron en un enfrentamiento en esa ciudad, mientras que en Salamanca, dos adultos y un menor fueron asesinados por un grupo de hombres que irrumpió a balazos en una taquería.
Aproximadamente a las 02:24 horas de este viernes, a la altura de la central de autobuses de Silao, sobre el bulevar Luis H. Ducoin, los dos oficiales se encontraban en servicio cuando se desató el enfrentamiento.
Los patrulleros Rodrigo Adolfo Ruiz, Manuel Iván Palomares y un tercer policía, quienes se encontraban en la unidad oficial 3704, informaron a la base central de la Policía Municipal que revisarían un automóvil tipo Escort, color gris, en el que viajaban tres hombres, debido a que presentaban “una actitud evasiva”.
Momentos después de este aviso, desde un teléfono celular uno de los tres policías avisó a la central de emergencias que eran atacados a balazos por los civiles y que necesitaban apoyo, pues había elementos caídos.
Cuando llegaron los refuerzos, con apoyo de paramédicos de la Cruz Roja, encontraron al agente Manuel Iván ya sin vida, mientras que Rodrigo estaba herido y fue trasladado a un hospital, donde falleció cuando era atendido.
En el sitio del enfrentamiento también quedó muerto uno de los civiles; otro lesionado murió más tarde en el hospital, y un tercero logró escapar, al correr sobre la avenida Ducoing y posteriormente internarse en un terreno baldío, sin que pudiera ser localizado en la búsqueda.
Un parte policíaco de Silao indica que al revisar las características de los responsables a través de las grabaciones de las cámaras en la avenida, éstas no registraron grabación durante el lapso en que se registró el intercambio de disparos entre los preventivos y los civiles.
La patrulla presentó huellas de unos seis disparos en distintos puntos de la unidad, puertas y parabrisas.
El gobierno municipal de Silao informó que hará un homenaje a los policías asesinados.
También se conoció que uno de los agentes acribillados no estaba armado. El elemento tenía pocos meses de haber egresado de la Academia y de haberse incorporado a las filas de Seguridad Ciudadana.
Unas horas antes de lo ocurrido en Silao, un grupo fuertemente armado irrumpió en una taquería de Salamanca y disparó contra las personas que en ese momento se encontraban cenando; un menor de 12 años y dos adultos -padre y tío del menor- murieron asesinados, y una mujer de la misma familia quedó gravemente herida.
En su huida, los sicarios tiraron una bolsa con restos humanos y dejaron una manta con un mensaje atribuido a un grupo delictivo.
Las víctimas fueron identificadas como Eduardo Hernández Sánchez, de 42 años; su hermano, Fernando Hernández, de 32, y Fernando, hijo de éste, de 12 años de edad.
La taquería se localiza en la comunidad Loma de Flores de Salamanca -en los límites con Irapuato-, donde aproximadamente a las 9 de la noche, cenaban los hermanos y el menor, cuando al negocio llegaron al menos 11 hombres en dos vehículos, de los que bajaron con sus armas y dispararon al local.
De allí, los sicarios se dirigieron a la comunidad de San José Temascatío, donde tiraron una bolsa con restos de un cuerpo.
De acuerdo con versiones extraoficiales, policías de Irapuato y Salamanca que acudieron ante el reporte de disparos debieron pedir refuerzos porque habitantes de la comunidad los agredieron.
Por ello, acudieron en apoyo elementos de Fuerzas estatales, Guardia Nacional, Ejército y Policía ministerial, que pudieron entrar hasta el local donde ocurrió el ataque.
Con información de ProcesoGuanajuato bajo fuego: Masacran a tres en taquería y asesinan a dos policías