La psicóloga del IMSS, Esmeralda Yelisse García Ortega, señaló que detrás de cada suicidio puede haber hasta 50 intentos de privación de la vida, “de hecho, las estadísticas revelan que hasta 42% de quienes se suicidaron ya lo habían intentado, y en hasta en 70% de suicidios la persona presentaba una enfermedad depresiva”.
Indicó que síntomas como desánimo, tristeza, sentimientos de culpa, confusión, falta de concentración y de memoria, fatiga, trastornos del sueño, desorientación o uso de alcohol y drogas pueden advertir sobre una crisis emocional, que de hecho si persiste por más de seis meses se considera una depresión, que puede conducir a un intento suicida o incluso a la consumación del acto de privarse la vida.
¿Cómo prevenir el suicidio infantil?
Cuando el menor funciona diferente de como lo hacía habitualmente, por ejemplo, era muy alegre y de repente se vuelve depresiva, cambia su actuar radicalmente.
El pequeño empieza a hacer referencia del suicidio ¿Qué pasaría si me muriera? o hacer este tipo de cuestionamientos.
Ante ello, existen diversas formas para prevenirlo:
No hablar con ellos de suicidio
Tener una buena comunicación con sus hijos
Si se da cuenta que el niño intentó hacerse daño, no alarmarse exageradamente
Enseñarle al menor a entender el fracaso como una oportunidad
No menospreciar ni minimice las conductas auto agresivas sencillas
No dejar visiblemente medicamentos, venenos o fertilizantes que estén al alcance de los niños
¿Cómo identificar las señales?
La psicóloga explica que previo al intento de suicidio, comúnmente las personas emiten mensajes o señales que pueden advertir sobre sus intenciones, las cuales por ningún motivo deben ser desestimadas.
Hacer afirmaciones suicidas
Estar preocupado con la muerte al conversar, escribir o dibujar
Regalar pertenencias
Distanciarse de amigos y familiares
Tener comportamiento agresivo u hostil
Descuidar el aspecto personal.
Escaparse del hogar
Comportamiento arriesgado, como hablar en forma imprudente
Un cambio en la personalidad
La psicóloga aclaró que si el problema es constante debe ser necesario acudir con un especialista para que el menor pueda ser atendido de manera más detalla y así elimine cualquier tipo de pensamiento negativo que lo lleve al suicidio.
Con información de UnoTv