“Es un hecho indudable que la renuncia de Jorge Alejandro Vera Noyola a la Fiscalía significa una inconformidad implícita con la política anticorrupción del Fiscal General del Estado, Federico Garza Herrera, por lo que no está demás cuestionar qué está sucediendo en esa entidad que aplica la justicia”.
Esto es lo que opina, Rubén Guajardo Barrera, presidente de la Comisión de Justicia del Congreso del Estado, tras su preocupación por el poco tiempo que permaneció en el cargo el también ex diputado local, hecho que le llamó poderosamente la atención porque aunque las personas son transitorias en los cargos, las instituciones son permanentes y algo tuvo que suceder para que se tomara tal decisión.
Por su parte, ahora esperará recibir rápidamente la propuesta del Jefe del Ejecutivo para nombrar al nuevo Fiscal Especializado en Hechos de Corrupción en los términos que marca la propia Constitución del Estado, perfil que al igual, debe tener las características propias de este encargo.
“Nos preocupamos por las características que debe tener cualquier candidato que nos envíen, es lamentable que se haya dado esto, toda vez que no sólo debemos estar preocupados por las herramientas que deben tener en materia legal para que salgan adelante, sino que además debe ser un personaje eficaz, impoluto y honesto”.
De acuerdo a la Constitución el Gobernador del Estado, debe proponer al Poder Legislativo los candidatos a ocupar los cargos de Fiscal General del Estado, Fiscal Especializado en Delitos Relacionados con Hechos de Corrupción y al Fiscal Especializado en Delitos Electorales, así como removerlos por causas graves.
También se debe hacer del conocimiento del Congreso del Estado para los efectos que ello conlleve, es por eso, que este tema es de especial preocupación para la Comisión de Justicia que preside el diputado local del Partido Acción Nacional.
“Estamos ciertos que quien sea puesto en esta encomienda debe conducirse entre la autonomía e independencia de poderes constitucionales, al igual debe reflejar eficacia y tener la suficiente capacidad técnica. Sería importante que también sea un perfil con la más alta experiencia, que no llegue a aprender sino que sepa investigar y conozca los procesos de especial trascendencia, relativos a los delitos económicos u otros cometidos por funcionarios públicos en el ejercicio de sus cargos relacionados con el fenómeno de la corrupción”.
