La representación de la FGR cuestionó los ingresos de Rosario Robles como secretaria de Estados durante el gobierno de Enrique Peña Nieto, al mostrar que tenía ingresos anuales por más de un millón de pesos, que no corresponden a los 40 mil pesos mensuales que declaró ganar.
Durante su intervención en la audiencia del 5 de febrero, donde se ratificó la medida cautelar de prisión preventiva, el agente del Ministerio Público de la Federación aseveró que Robles dijo en audiencias pasadas que su salario como titular de la Sedatu y de la Sedesol era de 40 mil pesos al mes.
La parte acusadora dijo que cuando Robles era funcionaria federal rentaba un departamento en una de las torres de Reforma 222, con un valor de 18 millones de pesos, y por el cual pagaba 37 mil pesos al mes de arrendamiento.
“La defensa no se ha apegado a la verdad (…) No podemos ver la mentira como algo normal”, acusó el agente del Ministerio Público federal, quien al final de su intervención citó a Aristóteles para enfatizar su postura: ‘El castigo del embustero es no creerle aunque dijese la verdad”.
Algunos de esos dichos le costaron que el juez Ganther Alejandro Villar Ceballos le impusiera una sanción de 20 UMA (unidad de medida y actualización) como apremio por utilizar calificativos durante su exposición, lo cual fue advertido desde el inicio de la audiencia.
En su intervención, el agente del Ministerio Público de la Federación también detalló la situación patrimonial de Robles durante los seis años que fue titular de la Sedesol y Sedatu.
Por concepto de salarios, en 2013 reportó haber tenido ingresos por un total de un millón 680 mil pesos; mientras que para 2014, aumentó a 2 millones 318 mil pesos; y en 2015, fue de 2 millones 223 mil pesos.
Para 2016, percibió 2 millones 266 mil pesos; en 2017, fueron de 2 millones 235 mil pesos; y en 2018, 2 millones 299 mil pesos; para dar un total de más de 12 millones 961 mil pesos.
La Fiscalía General de la República también reveló que, entre 2013 y 2018, Robles retiró en dos momentos, más de 3 millones 200 mil pesos por concepto de separación voluntaria, prestación que tenían derecho los servidores públicos.
Por lo que, como secretaria de Estado durante el sexenio de Peña Nieto, Robles Berlanga percibió más de 16 millones de pesos.