Veinte minutos antes de las siete de la mañana, un grupo de mujeres hizo aparición en el Palacio Nacional, atendiendo a la convocatoria para la primera de una serie de manifestaciones contra el feminicidio de Ingrid Escamilla.
Uno de sus motivos era llamar a los medios de comunicación a no difundir imágenes de la violencia con la que son asesinadas las mujeres, luego de que se exhibieron los restos de Ingrid.
Algunas encapuchadas empezaron a pintar las paredes de Palacio Nacional y la puerta Mariana, misma que una integrante de la protesta trató de incendiar; en una de las puertas de la calle de Moneda, en la contraesquina de Palacio y la Catedral Metropolitana, prendieron fuego a una red que cubre un pilar.
Ante la exigencia de hablar con alguna autoridad, el subsecretario de Gobierno de la Ciudad de México, Arturo Medina, intentó hablar con ellas, pero fue rociado con pintura y agredido. Leticia Ramírez, directora de la Oficina de Atención Ciudadana de la Presidencia, fue quien las atendió.
Efrén Argüelles, reportero de Grupo Imagen, fue agredido cuando una encapuchada tomó su celular y lo lanzó hacia un grupo de inconformes para pedirles que destruyeran el aparato; cuando él trató de recuperarlo, le aventaron agua.
Más tarde, policías colocaron vallas alrededor de monumentos y edificios del Centro para evitar que se realizaran más pintas y destrozos, como ocurrió antes en Palacio Nacional.
Al sur de la ciudad, alrededor de las 12 del día, un grupo de diez mujeres se dio cita en las instalaciones de un periódico en demanda de que ya no sean publicadas las fotografías de feminicidios.
Cuatro de ellas dialogaron con el director y se retiraron, sin hacer desmanes.
Por la tarde, cientos de mujeres se reunieron en el memorial conocido como Antimonumenta, ubicado frente al Palacio de Bellas Artes, para iniciar la marcha hacia la sede de otro periódico. Las manifestantes trataron de entrar por una puerta trasera del edificio y pintaron y quemaron un camión repartidor. El grupo gritó consignas y empujó a la valla formada por mujeres policías, quienes lanzaron gases para dispersarlas y evitar un enfrentamiento mayor.
Luego de ser recibidas por el director del medio, continuaron su protesta hacia el Ángel de la Independencia. A su paso vandalizaron la estación Hidalgo del Metrobús y diverso mobiliario urbano en Paseo de la Reforma. Durante su camino coreaban el tema del performance Un violador en tu camino.
Al llegar al Ángel se enfrentaron nuevamente con la policía, que roció anhídrido carbónico (sustancia que contienen los extintores) para dispersarlas. Ahí concluyeron su jornada de protesta.
Estados Apoyan
Un grupo de mujeres de Tuxtla Gutiérrez y San Cristóbal de las Casas, Chiapas, realizó una marcha de protesta por el feminicidio de Ingrid Escamilla.
Las feministas caminaron portando pancartas y con manchas de pintura roja en el rostro. Además, pintaron algunos grafitis a su paso, desde el Parque Bicentenario hasta concluir en el Parque Central de Tuxtla Gutiérrez.
En Aguascalientes, alrededor de 80 mujeres se manifestaron en la plaza principal para descalificar la publicación de las fotos del crimen de la joven de 25 años. También señalaron que están hartas de que a las mujeres soporten la violencia familiar “por que es por amor”.
En Cancún, Quintana Roo, marcharon de manera pacífica y encendieron veladoras por las víctimas de feminicidios.
Con información de Excélsior