El exalcalde de Nueva York Michael Bloomberg puso fin este miércoles a su campaña presidencial, después de que el masivo gasto del multimillonario en anuncios de campaña en todo Estados Unidos no se concretó en victorias convincentes en el Supermartes de las primarias del Partido Demócrata.
En un comunicado enviado por su campaña, Bloomberg aseguró que dará su apoyo al exvicepresidente Joe Biden para la nominación.
Este último logró importantes victorias el martes en el Sur, Medio Oeste y Nueva Inglaterra, en el principal día de votaciones en la batalla por la nominación presidencial demócrata, que se ha convertido ya en un mano a mano con Bernie Sanders, que contaba con ventaja en California.
El exvicepresidente Biden, cuya campaña estaba agonizando hace pocas semanas, se impuso en nueve de los 14 estados que participaron en el Supermartes, incluyendo victorias inesperadas en Texas y Massachusetts, en la carrera para enfrentarse al presidente republicano Donald Trump en noviembre.
Apenas días después de que su campaña resucitara con un contundente triunfo en Carolina del Sur, Biden, de 77 años, emergió como el ganador de consenso para el ala moderada del Partido Demócrata frente a Sanders, de 78, un senador izquierdista con gran apoyo entre los jóvenes.
“Para todos los que han sido derrotados, descartados, abandonados, esta es su campaña”, dijo Biden a sus entusiastas seguidores en Los Ángeles. “¡Estamos muy vivos!”.
En la que sería la mayor sorpresa de la jornada, Edison Research proyectó un triunfo de Biden en Texas, el mayor premio tras California. Sanders invirtió mucho en Texas y contaba con la población latina para que le impulsara hacia la victoria.
Sanders, que antes iba en primer lugar y esperaba dar un gran paso hacia la nominación el martes, se impuso en Colorado, Utah y su estado natal de Vermont, según Edison Research.
Biden, que contó con el abrumador respaldo del voto afroamericano, moderado y de mayor edad, ganó en Alabama, Arkansas, Massachusetts, Minnesota, Carolina del Norte, Oklahoma, Tennessee y Virginia.
Fox News y AP proyectaron que Sanders ganó en California, cuyos 415 delegados representan el mayor botín. Edison Research y otras cadenas aplazaron la declaración de un ganador, ya que los resultados seguían llegando. Maine estaba muy ajustado, ya que tanto Biden como Sanders obtuvieron cerca de un tercio de los votos tras el recuento del 73% de los sufragios.
Sin nombrarlo, Sanders apuntó directamente a Biden durante un mitin con sus partidarios en Vermont, criticando su voto de 2002 a favor de la autorización de la guerra en Irak y su apoyo a los acuerdos comerciales globales a los que Sanders se opone.
“Vamos a ganar la nominación demócrata y vamos a derrotar al presidente más peligroso de la historia de este país”, dijo Sanders en referencia a Trump.
La jornada confirmó el espectacular vuelco de la situación para Biden, tras el pobre desempeño en las primarias iniciales de Iowa y Nuevo Hampshire. Hasta hace una semana iba por detrás de Sanders en la mayoría de sondeos estatales y nacionales.
Estos resultados dejaron al multimillonario exalcalde de Nueva York Michael Bloomberg con virtualmente poco que mostrar, aparte de los más de 500 millones de dólares que gastó en publicidad. Su única victoria fue en el pequeño territorio estadounidense de Samoa Americana.
También fue una dura noche para Elizabeth Warren, que terminó muy por detrás de Sanders y Biden en la mayoría de los estados, incluido Massachusetts, donde es senadora y triunfó el exvicepresidente pese a no haber gastado dinero ni desplegado colaboradores allí.
El martes estaba en juego más de un tercio de los delegados que acabarán eligiendo al nominado demócrata en la convención de julio. Los recuentos iniciales mostraron que Biden aventajó a Sanders en 332 a 265 delegados, con cientos más aún por ser adjudicados.
Hasta la fecha, Biden lidera a Sanders en 385 a 325 delegados. Un candidato necesita 1,991 para obtener la nominación demócrata y luchar por la Casa Blanca.
Con información de Forbes