Italia ha puesto en cuarentena obligatoria a más de 16 millones de personas en la región de Lombardía y a unas 14 provincias del país, amenazando con tres meses de cárcel a quienes la violen.
Con esta medida, ordenada por el primer ministro de Italia, Giuseppe Conte, se busca frenar la propagación del brote de coronavirus y evitar la sobrecarga del sistema de salud público.
Aparte de toda la región de Lombardía, se aplicará en las provincias de Módena, Parma, Piacenza, Venecia, Emilia Romaña, Rímini, Pesaro y Urbino, Padua, Verbano-Cuscio-Osola, Treviso, Vercelli, Novara, Asti y Alessandria.
En particular, el Gobierno italiano ha prohibido que la gente entre y abandone las áreas mencionadas al menos hasta el 3 de abril a menos que se trate de una emergencia. Además, ha ordenado cerrar gimnasios, cines, piscinas, museos y hoteles. También ha suspendido las protestas y los espectáculos. Las competiciones deportivas continúan celebrándose pero a puerta cerrada.
Las autoridades italianas también han contemplado la posibilidad de contratar a más médicos ante el posible deterioro de la situación sanitaria. Se espera que el Gobierno italiano refuerce los hospitales con unos 20.000 médicos y enfermeros.
Los ciudadanos que violen la cuarentena podrán ser castigados con hasta tres meses de cárcel.
Una vez se publicó el 7 de marzo el borrador de la nueva orden, cientos de personas se apresuraron a abandonar Lombardía por miedo a quedarse atrapadas allí, informaron los medios locales.
Actualmente Italia es el país europeo que ha registrado el mayor número de contagios y muertes por el coronavirus: 5.883 infectados y 233 fallecimientos.
Con información de Sputnik