En entrevista con la UNAM Global señalaron que croquichapi, como denominaron el producto, es un medallón de carne que asemeja a na hamburguesa y que puede consumirse por personas de todas las edades.
“El insecto es un alimento muy nutritivo, por cada gramo son 70% de proteína y nuestro medallón tiene 23%, más que un bistec promedio”, explicó a Notimex Alfredo Díaz Cano, uno de los creadores del nuevo producto.
Los alumnos de las Facultades de Economía, Contaduría y Administración y Ciencias de UNAM destacaron que la finalidad del proyecto, que se vende a través de la empresa Chapi, es cumplir con una economía circular, ya que su proceso es biodegrable en todas sus fases.
¿Podrá la carne sintética sustituir a la animal?
“Nos interesaba el beneficiar al medio ambiente ya que la industria cárnica es una de las principales causantes del efecto invernadero. Mientras que la cría de chapulines es 14 veces menos contaminante, usa menos tierra, agua y emisiones de CO2”, aseguró Díaz Cano.
Finalmente, mencionaron que su proveedor de chapulines es de Oaxaca y los materiales se consiguen en mercados orgánicos. Sin embargo, esperan hacer su propio criadero a mediano plazo, para lo cual ya cuentan con apoyo de investigadores y entomólogos de la UNAM.
Con información de Sputniknews