El primer ministro canadiense Justin Trudeau y Sophie Grégoire, su esposa, iniciaron una cuarentena voluntaria el jueves por presentar ella síntomas parecidos un resfriado, lo que ha despertado sospechas de coronavirus.
La oficina del gobernante informó que la primera dama regresó el miércoles por la noche de un compromiso donde daría una charla en Gran Bretaña y tenía un poco de fiebre.
Ya se le realizó la prueba para detectar si está enferma de COVID-19 y están a la espera de resultados.
Como medida de precaución, el primer ministro decidió aislarse y trabajar desde casa hasta recibir los resultados de Sophie”, indicó el comunicado.