En la década de los 50 los autocines tenían su máximo explender, y ahora en tiempos del coronavirus regresaron como de entre las cenizas, ya que debido a la pandemia, las personas tomaron estas medidas de ir a ver una película. Cuando recordamos este tipo de salas viajamos al pasado.
Estos cines tuvieron su momento más glorioso. Había miles en Estados Unidos, pero a la fecha solo hay 305 en todo ese país. Sin embargo, el COVID-19 del les dio otra oportunidad a este clásico negocio. Ya que otros competidores tradicionales, estaban cerrados, debido a esta pandemia que estamos viviendo y las medidas que se han tomado a raíz de esta enfermedad.
“El negocio de la semana pasada fue lo que solemos ver en julio y agosto, cuando los niños no van a la escuela. ¡Fue un poco loco aquí!(…) Estamos en el mismo bote que todos los demás ahora, pero durante una semana allí parecía una buena oportunidad para que todos salieran. Con las escuelas cerradas y cosas similares, tenemos muchas personas buscando algo que hacer, y la entrada parecía encajar muy bien” dijo Jack Ondracek, propietario del Rodeo Drive-In en Washington.
Pero las “malas noticias” llegaron cuando les dijeron que tenían que cerrar por completo, ya que posteriormente se impuso el cierre de todos los negocios no esenciales. A pesar de que muchos empresarios estaban felices de que su negocio hubiera permanecido abierto, ahora están de acuerdo con el cierre ya que es primero la salud.
Alrededor del mundo diferentes autocines ieron un aumento en sus ventas que van desde el 50% al 60%. Se debe a que este pasatiempo se veía muy seguro, y que las personas salen juntas de sus casas, van juntas en coche y ven la película juntas sin salir de su auto.
Una de las medidas que se tomó fue acordonar los lugares del estacionamiento, para que los autos se acomodaran con al menos tres metros de distancia. A la hora de ecomprar las entrada solo se podían hacer via online, para evitar los riesgos de contagio.
Con información de La Verdad