En plena contingencia por la pandemia del nuevo coronavirus (COVID-19) la Central de Abasto no ha parado la actividad comercial y opera sin medidas sanitarias.
Con base en un recorrido por las naves de frutas y verduras, se constató una alta afluencia de camiones de transporte, así como de “diableros” que descargan mercancía de todo tipo.
También llegan clientes en taxis y autos particulares para surtirse. Sin embargo, muy pocas personas, entre vendedores, cargadores, trabajadores y compradores utilizan cubrebocas y guantes.
No se observó ningún operativo o filtro en donde se ofrezca gel o se pida se mantenga la medida de sana distancia que comprende un metro entre cada persona.
En puestos de comida la higiene es nula, sin embargo, en algunos se colocaron carteles indicando que sólo venden para llevar.
Entre los pasillos se observaron tiraderos de desperdicios al aire libre.
Con información de UnoTv