En el hospital Circolo, en Varese (Italia), un robot llamado Tommy ayuda a los médicos y enfermeras a atender a los pacientes con coronavirus. Tommy puede medir la presión sanguínea y la saturación de oxígeno para los pacientes en la UCI, incluidos los que están conectados a un ventilador. Pero no es el único robot que facilita la labor sanitaria.
Tommy es tan solo un ejemplo de los avances tecnológicos que se están haciendo para minimizar los riesgos de la pandemia. Los laboratorios de investigación están creando nuevos robots, incluido uno diseñado para permitir a los trabajadores de la salud tomar muestras de sangre de forma remota y realizar pruebas bucales con bastoncillos.
Robots que hacen test
Un grupo de investigadores del King’s College de Londres, entre los que se encuentra la española Rocío Martínez, está estudiando la implantación en España de robots capaces de hacer hasta 70.000 test de coronavirus a la semana. A su vez, la Universidad de Castilla-La Mancha (España) ha recibido una donación de un millón de euros, que usará para comprar robots para hacer pruebas de COVID-19.
Gafas para ver el virus
Unos investigadores andaluces han recibido financiación del Gobierno español para desarrollar un dispositivo de Inteligencia Artificial (IA) para evaluar la temperatura de personas sin la necesidad de contacto. De este modo, se podrá ver el coronavirus en las superficies.
“Este avance supondría una gran contribución a los esfuerzos por contener la pandemia y evitar nuevos contagios, ya que permitiría detectar con precisión las superficies contaminadas por el coronavirus”, destaca la Universidadad de Sevilla (US) en un comunicado.
China ya lo hizo. Agregaron unas gafas a los cascos de los policías que medían la temperatura de varios cientos de personas en cuestión de minutos:
Drones, aliados contra el coronavirus
Las cámaras que integran los drones permiten verificar la temperatura y el ritmo cardíaco y respiratorio de un individuo desde la distancia. Además, pueden transportar medicinas o alimentos para evitar el contacto entre humanos como ha sucedido en China. Y en Madrid, la Policía Municipal utilizó drones para difundir por megafonía la recomendación a la de permanecer en casa durante el estado de alarma.
Robots repartidores de comida
En algunas ciudades de Colombia como Medellín, unas 15 cajas robotizadas recorren las calles ante la atenta mirada de los transeúntes. Son parte de un plan piloto puesto en marcha por las compañías colombianas Rappi y KiwiBot para evitar el contacto personal en medio de la cuarentena para combatir el coronavirus. En España habrá que esperar hasta 2024, que es cuando se estima abrir el debate para legalizar la conducción autónoma y completamente independiente de los robots.
Cinco investigadores de la Escuela Politécnica Federal de Lausana (Suiza) están desarrollando una aplicación para móvil que determinará si una persona padece o no COVID-19 tras grabar y analizar su tos, según informó esta institución en un comunicado.
Nos reconocerán hasta con mascarilla: “La contrapartida de la biometría es el hipercontrol”
La aplicación, llamada “coughvid”, estará disponible en las próximas semanas, aunque ya se ha abierto una página web en la que los interesados, incluidos pacientes de COVID-19, pueden grabar sus toses para ayudar a crear un “banco de datos” que usará inteligencia artificial con el fin de efectuar los diagnósticos.
Por su parte, un grupo de científicos catalanes, liderado por el investigador Brian Subirana, está perfeccionando un modelo de reconocimiento de voz que ayudará a hacer un diagnóstico del COVID-19 a través del móvil y de forma gratuita.
La aplicación de los robots en la lucha contra la pandemia resulta un gran avance en el terreno tecnológico. Queda demostrado que la utilización de estas máquinas podrá marcar la diferencia en futuros desastres.
Con información de Sputniknews