Científicos han descubierto que el cometa interestelar 2I\Borísov, encontrado en 2019 por un ruso aficionado en astronomía, se formó a temperaturas muy bajas en regiones alejadas de la estrella madre.
Los astrónomos de la NASA han analizado la composición química del cometa gracias a los telescopios ALMA y Hubble. Descubrieron que el cometa no se originó en el sistema solar y no es como otros cometas. Surgió en algún lugar en las afueras de un sistema alienígena, lejos de la estrella madre y a temperaturas extremadamente bajas.
Los resultados del estudio fueron publicados por la revista científica Nature Astronomy.
El cometa fue descubierto el 30 de agosto de 2019 por un astrónomo de Crimea llamado Guennadi Borísov, quien usaba su telescopio hecho en casa. Se convirtió en el primer cometa interestelar activo en haber sido descubierto por los humanos. El diámetro de su núcleo es de aproximadamente un kilómetro. El cuerpo espacial contiene mucho polvo y materia orgánica.
Con información de Sputniknews