El 11 de junio se conmemorará el el Día de las Mulas o Jueves de Corpus Christi, día donde la iglesia católica celebra la eucaristía que se realizó el Jueves Santo, pero 60 días después del domingo de Resurreción.
La tradición se remonta al “Milagro de Bolsena” que data del siglo XIII, donde un sacerdote de origen alemán Pedro de Praga encabezaba la peregrinación de Corpus Christi a Roma, pero en la ciudad de Bolsena cuando celebraba una misa junto a la tumba de Santa Cristina, en el momento de la consagración comenzó a salir sangre de la hostia.
Como era natural, el sacerdota hizo por querer esconder la sangre, pero no le fue posible, así que interrumpió la misa y contactó lo antes posible presencia del Papa Urbano IV, quien mandó traer la hostia y el corporal con las gotas de sangre, así como instituyó la celebración en todo el mundo al reconocer esto como milagro.
JUEVES DE CORPUS
Esta fecha se lleva a cabo dos meses después de la Semana Santa y que en México también se le conoce como el Día de las Mulas y que ha ido desapareciendo.
En 1526, la tradición fue heredada por los conquistadores españoles y a las puertas de la Catedral Metropolitana salían procesiones donde participaban los campesinos que cargaban sus mulas con su mejor cosecha para aprovechar la misa y dar gracias a Dios, de ahí el nombre de Día de las Mulas.
La acción se volvería replicada año con año en una gran feria, donde campesinos se congregaban congregaba artesanos y comerciantes de distintos rumbos del país, que traían mercancías también a lomo de mula (frutos de la temporada y artesanías que transportaban en guacales).
Así se vive el Jueves de “Corpus Christi” o Día de Las Mulas en #Puebla
Para reforzar la imagen de las mulas, cuentan que un hombre llamado Ignacio tenía dudas sobre su vocación sacerdotal y un Jueves de Corpus le pidió a Jesucristo que le enviara una señal.
Por eso, este Día de las Mulas cientos de personas llevan a sus hijos a las iglesias con un atuendo de “indito”, vestidos de manta, con grandes bigotes los niños y trenzas para las niñas, fajillas multicolores y huaraches, colgadas a sus espaldas los guacalitos donde cuelgan comales, sopladores de palma, platos, anafres y cucharas en miniatura.
“Y las mulas sólo quedaron en figuritas multicolores de barro, madera u hoja de elotes que venden afuera de las iglesias. Pero también dan motivo a algunas bromas cuando te regalan una mulita y te felicitan “en tu día”.
Con información de Debate