En medio de la pandemia del COVID-19, varias familias fueron expulsadas del municipio de Nochistlán, en Zacatecas, por el crimen organizado.
José tuvo que huir con su esposa e hijos cuando supuestos integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación, irrumpieron, a principios de mayo, en su casa en la localidad de Tlachichila.
José Manuel, desplazado por el crimen organizado, dijo: “Le doy máximo dos horas para que se salga, dijo ya la plaza tiene dueño, somos nosotros el Cártel Jalisco Nueva Generación, y ya no queremos a nadie del pueblo aquí y así fue como de perdis unas 10, 20 familias si corrieron del pueblo”.
Las víctimas sostienen que hay colusión de los delincuentes con algunos policías municipales, que han sido captados posando con armas de uso exclusivo del Ejército.
Rafael, desplazado por el crimen organizado, comentó: “Estaban llegando a las casas junto con los sicarios y sacando a las personas de sus domicilios”.
El gobierno del estado dijo en marzo a ‘Despierta’ que el sur del estado, en particular el municipio de Nochistlán, es considerado un punto rojo.
Jehú Salas Dávila, secretario general de Gobierno de Zacatecas, argumentó: “Nochistlán sí es precisamente uno de estos focos rojos, una de nuestras zonas de atención prioritaria. Ha sido particularmente complejo no solo desde esta administración, pero hay instalado un grupo delictivo, lo que hemos estado haciendo ha sido sostener la presencia de policía estatal, incluso el ejército mexicano ha reforzado la presencia en esta región del estado”.
El 28 de marzo, tres policías de Nochistlán murieron durante un enfrentamiento en Tlachichila, municipio de Nochistlán.
Mario aseguró a ‘Despierta’, que a él iba detenido en una de las patrullas que participó en el enfrentamiento.
“Escuché cuando dijeron que, pues se estaban retirando, como que se sintieron perdidos o algo, estaban retirándose y en eso yo sentí el balazo atrás de mi porque me voló la cachucha y todo para enfrente”.
Herido, logró huir cuando la balacera paró.
Tras el desplazamiento de varias familias de Nochistlán por el crimen organizado, la Guardia Nacional reforzó su presencia en la zona, pero la violencia también ha alcanzado al municipio colindante, Apulco, ahí dos empleados del municipio fueron asesinados en abril hace unos días hubo otra balacera.
La presidenta municipal de Apulco, quien está amenazada de muerte por el crimen organizado, dijo a ‘Despierta’ que las advertencias en su contra se han incrementado.
Janeth Morales, presidenta municipal de Apulco, dijo: “La amenaza existe, yo no puedo estar en un solo lugar, tengo que andarme moviendo de un lado a otro por lo mismo, porque pues yo sé que ellos me tienen ubicada y tengo que moverme de un lado a otro”.
El gobierno de Zacatecas entregó a la presidenta una camioneta blindada para su seguridad, pero ella sostiene que no tiene garantías para trabajar.
Con información de Televisa