Vivir como vivíamos hace un año es imposible: ahora salir a la calle implica un ritual sanitario que hace poco hubiera parecido impensable. Lo mismo ocurre con nuestro trabajo, nuestras interacciones sociales, nuestra forma de divertirnos. Los negocios de la Ciudad de México se adaptan también a la nueva normalidad y en el camino han hecho algunos letreros que reflejan los cambios de la sociedad y su afán de recuperarse.
Y es que ahora, actividades que nos parecían inofensivas ahora nos parecen riesgosas. En esta papelería, por ejemplo, ya no admiten las memorias usb a la hora de imprimir, con el fin de aminorar al máximo la posibilidad de contacto físico con los clientes.
Las nuevas formas de imprimir. (Imagen: Especial)
En algunos negocios, como los consultorios médicos o las peluquerías, no es posible eliminar el contacto con los clientes. Pero sí se busca minimizar las posibilidades de contagio con cubrebocas o reduciendo al mínimo la cantidad de presentes en el local.
Cortarse el pelo es una experiencia distinta. (Imagen: Especial)
No han desaparecido los letreros clásicos que distinguen a los mercados de la Ciudad de México. Sin embargo, los chistes rotulados ahora conviven con peticiones más inmediatas como ponerse gel antes de tocar la fruta.
Letero en mercado de CDMX. (Imagen: Especial)
Y aunque la mayoría de los letreros de la nueva normalidad indican, sobre todo, instrucciones para evitar contagios o modificaciones en el servicio, algunas peticiones son más agresivas que otras.
En este caso, una tienda de abarrotes solicita al posible cliente que respete las reglas de forma irónica.
“Sabemos que usted es inmortal”. (Imagen: Especial)
Por desgracia, no todos los clientes siguen con el mismo cuidado las directrices de la nueva normalidad. Hay quien rechaza el cubrebocas y hay quien no respeta la sana distancia. El problema ha motivado que el gobierno de la ciudad publique listas de colonias donde se respeta más y donde se respeta menos el uso de cobrebocas.
Ante estas actitudes, algunos mercados han sido más explícitos a la hora de dirigirse al posible cliente que se rehusa a seguir las reglas.
Letrero en mercado de CDMX. (Imagen: Especial)
Los mexicanos suelen jactarse de su ingenio; y eso se refleja incluso en los carteles de la capital. Carlos Monsiváis solía decir que la Ciudad de México no tiene miedo de nada porque ya le ha pasado todo. Muchos de estos letreros salidos de nuestras calles reflejan esa actitud imbatible.
Con información de Chilango