A partir del 2010, la Asociación Mundial para la Salud sugirió establecer los 4 de septiembre para promover la conciencia social sobre la salud sexual.
Cada año se toma un lema distinto. El de 2018 es: “La salud sexual y los derechos sexuales son fundamentales para el bienestar”.
Los derechos sexuales deben ser reconocidos, respetados y defendidos por todos, no sólo por ser un tema de salud, sino por ser una libertad inherente a los humanos.