14 por ciento de los voluntarios de la vacuna rusa contra el Covid-19, llamada Sputnik V, han sufrido efectos secundarios como fiebre o dolor muscular.
Así lo informó informó el ministro de Sanidad de Rusia, Mijail Murashko, quien detalló que ya “fueron vacunadas más de 300 personas” contra el coronavirus.
La inyección, que fue desarrollada por el Instituto Gamaleya de Moscú, fue registrada en agosto pasado y la nación que encabeza Vladimir Putin afirma que es una protección efectiva contra el virus SarsCov-2.
De acuerdo con Europa Press, se dijo que tres grandes fabricantes se unieron al trabajo sobre la vacuna Sputnik V y “en paralelo está en marcha la producción industrial de una gran cantidad de dosis de la vacuna, incluidas formas liofílicas y líquidas”.
Según los desarrolladores, la vacuna rusa ha demostrado una inmunogenicidad estable y protegerá contra el Covid-19 por un plazo de hasta dos años.
Fue a inicios de septiembre cuando comenzaron los ensayos posteriores al registro de la vacuna, en los que participarán unos 40 mil voluntarios, informó la agencia de noticias rusa Sputnik.