La rabia en humanos bajó un 98% entre 1983 y 2019 en América. México fue la primera nación libre del padecimiento. La agencia regional de salud señala que el avance ha sido posible gracias a la solidaridad entre los países, que han mantenido la vigilancia y prevención pese a las restricciones dictadas por la pandemia de COVID-19.
El continente americano se encuentra, con una disminución de 98% de los casos entre 1983 y 2019, según datos de la cerca de eliminar la rabia humana Organización Panamericana de Salud (OPS), la agencia que lidera la estrategia contra la enfermedad.
En el Día Mundial contra la Rabia, celebrado este lunes como cada 28 de septiembre, la OPS dio cuenta de sólo tres casos de rabia en personas en América en 2019, año en que validó a México como el primer país del mundo en eliminar la rabia transmitida por el perro.
El doctor Ottorino Cosivi, director del Centro Panamericano de Fiebre Aftosa y Salud Pública Veterinaria (PANAFTOSA) de la OPS explicó que el logro continental ha sido posible “gracias a la solidaridad entre los países, el intercambio de lecciones aprendidas, la identificación y priorización de riesgos, así como las acciones de monitoreo y vigilancia epidemiológica en personas y reservorios”.
La jornada contra la enfermedad, cuyo lema de este año es “Acabemos con la rabia: colaboremos y vacunemos”, tiene el propósito de promover la lucha contra el padecimiento, aumentar la concientización sobre su prevención y celebrar los avances alcanzados.
Este año, el Día Mundial también destaca la importancia de la vacunación canina y la necesidad de un esfuerzo conjunto para llegar a la eliminación de ese mal.
La letalidad y la falta de una cura hacen de la rabia una cuestión de importancia extrema para la salud pública. A nivel mundial, 60.000 personas mueren cada año a causa de la enfermedad, la mayoría de ellas en Asia y África.
Vacunación animal
La OPS recordó que, pese a su gravedad, la rabia puede ser eliminada en el entorno urbano, donde es transmitida por perros y gatos, a través de medidas eficientes de prevención como la vacunación animal, la educación sanitaria y la atención médica con el tratamiento preventivo en personas agredidas por animales.
Estas medidas forman parte del Programa Regional de Eliminación de la OPS, dijo el doctor Julio Cesar Pompei, coordinador de Zoonosis de PANAFTOSA, quien atribuyó el gran avance continental al compromiso de las autoridades de salud de los países, a la dedicación técnica de los agentes sanitarios, a la concientización de la población y a la coordinación de esa estrategia.
Continuidad pese a la pandemia
En el contexto de la pandemia del coronavirus, la OPS subrayó la continuidad del Programa en la región.
“La actual pandemia por COVID-19 y las restricciones de salud pública inherentes a la misma no impidieron que los países mantuvieran los compromisos con las acciones de vigilancia y prevención de la rabia, ya que son actividades consideradas prioritarias e impostergables”, apuntó Pompei.
Está previsto que para 2022 se haya eliminado en América la rabia humana de origen canino.
Para ello, PANAFTOSA recomienda asegurar el acceso oportuno a la profilaxis pre y post exposición al 100% de las personas agredidas por animales sospechosos, así como mantener una alta cobertura de vacunación canina y felina, eficiente vigilancia epidemiológica, sensibilizar a la comunidad, e impulsar acciones para prevenir la reintroducción en países donde ha sido controlada.
A través de PANAFTOSA, la OPS proporciona cooperación técnica a todos los países de la región desde 1983, cuando se creó el Programa Regional de Eliminación de la Rabia Humana Transmitida por el Perro.
PANAFTOSA es un centro científico de la Organización Panamericana de la Salud que brinda cooperación técnica en salud pública veterinaria a todos los países miembros y trabaja para la prevención, la vigilancia y el control de las zoonosis, la promoción de las iniciativas para mejorar los sistemas de inocuidad de los alimentos y la erradicación de la fiebre aftosa, con el objetivo de promover la salud pública y el desarrollo socioeconómico de la región.