NO SABEMOS NADA DE ÉL, SÓLO QUE LLEVA MÁS DE 22 AÑOS EN SOLEDAD. ES EL ÚLTIMO DE SU TRIBU, UNO DE LOS GRUPOS INDÍGENAS NO CONTACTADOS DEL AMAZONAS CONDENADO A DESAPARECER.
“Es el único superviviente de su tribu. No sabemos quién es, el nombre de su pueblo o qué lengua habla. Probablemente, su gente fue masacrada por los ganaderos que están invadiendo la región a toda máquina”: así define Survival International (organización por los derechos de los pueblos indígenas) la vida del ‘hombre del agujero’.
¿QUIÉN ES EL ‘HOMBRE DEL AGUJERO’?
Se trata del último sobreviviente de una tribu amazónica no contactada, uno de los grupos indígenas que prefirió aislarse del resto del mundo y mantener su cultura y tradiciones sin tener contacto con el mundo exterior.
Es conocido como ‘el hombre del agujero’ por los medios en Brasil, debido a que acostumbra cavar enormes zanjas de casi dos metros de profundidad que sirvwn como trampas de animales o bien, como refugio ante un posible ataque.
Se cree que lleva viviendo en soledad al menos 22 años. La hipótesis más certera es que la explotación ilegal del Amazonas (especialmente minera y maderera) de los años 80 provocó que distintos grupos con intereses comerciales invadieran el territorio de su tribu y por lo tanto, es muy probable que como parte de los distintos ataques a grupos indígenas registrados en 1995, los demás miembros fueran asesinados y él resultara el único sobreviviente.
La Frontera Amazónica de los no contactados es el hogar de la gran mayoría de los pueblos aislados del mundo.
En este espacio de la selva que se extiende sin distinguir las fronteras de Perú, Bolivia y Brasil habitan más de cien pueblos indígenas no contactados, grupos que decidieron mantener su cultura y tradiciones sin tener contacto con el mundo exterior y cuya decisión debe ser respetada.
En 2005, FUNAI (la Fundación Nacional del Indio, que establece las políticas que protegen a los pueblos indígenas de Brasil) realizó una expedición de la mano de indígenas de la zona y Survival a la zona que habita el hombre del agujero para saber si seguía con vida y en qué condiciones estaba.
Después de encontrar su campamento, una casa construida con palma y un jardín donde cultiva distintos vegetales, además de los típicos agujeros que realiza para cazar, FUNAI decidió dejar de acercarse al hombre del agujero y evitar cualquier contacto en lo sucesivo.
En su lugar, la Fundación eligió respaldar su decisión como último miembro de su tribu de mantenerse aislado, ampliando más su territorio y manteniendo una vigilancia en el perímetro para evitar la llegada de pistoleros a la zona.
Después de 13 años sin noticias, en 2018 FUNAI compartió el video de un nuevo avistamiento: en el material de poco más de un minuto grabado a la lejanía, se observa al hombre del agujero en aparentes buenas condiciones talando un árbol. Se determinó que en ese entonces tenía unos 50 años y buena condición física, lo que dejó tranquila a la Fundación en aquél entonces.
Conseguir nueva evidencia de que el último miembro de su tribu sigue vivo era elemental para la Fundación, toda vez que su presupuesto se ha recortado y el avance de las madereras en el Amazonas con el consentimiento del gobierno en turno dificulta cada vez más proteger el territorio de los no contactados.
Con información de Muy Interesante