Una de las combinaciones más especiales de esta época del año: vestidos con botas. Llega el otoño y todavía no estamos preparadas para decirle adiós a los vestidos, pero sí estamos ansiosas por empezar a usar todas las botas y botines que encontremos, y es así como los vestidos con botas, practicamente, se convierten un uniforme otoñal. Es tan sencilla que funciona cada vez. Busca tu vestido favorito de entretiempo, un par de botas y algunos accesorios que vayan a juego y estás lista para comenzar tu día.
Es cierto que la mayoría de los estilos de botas funcionan con casi todos los vestidos, pero aquí vamos a mostrarles tantas las apuestas seguras que hemos visto toda la vida, como las nuevas tendencias de botas y cómo llevarlas con esos vestiditos que tanto te gustan. Las chunky boots negras para contrastar con vestidos (o faldas, nunca está de más) ultra femeninos; vestidos midi hechos para botas hasta la rodilla, y los estilos maxi largos que funcionan perfectamente con botines llamativos. ¿Preparada? Hay una opción para todos los estilos.
Botas chunky con vestidos románticos
La abertura en medio del vestido hará, no solo, que luzcas tus botas, también que no pierdas centímetros de altura
© Jonathan Daniel Pryce
vestido blanco con botas negras
Ya sabemos que las botas estilo chunky son la tendencia, así que si las quieres incorporar en tu atuendo y, las dudas te invaden de cómo es mejor llevarlas con un vestido, no te compliques y ve por un look sencillo. Las grandes protagonistas serán las botas, así que elige un vestido bonito, pero sencillo. Lo curioso de esta tendencia es como los vestidos con botas de este estilo generan un equilibrio entre lo que puede ser una prenda muy femenina, como el vestido, con otra más atrevida, como las botas. No restan entre sí, todo lo contrario, es un contraste acertado y llamativo.
Los vestidos largos con botas altas, de las que desconocemos su final, han sido una dupla infalible por años. Lo siguen y seguirán siendo. Es una apuesta segura, pero elegante y, por sobre todas las cosas, apta para el clima invernal. Esta es una muestra que no debemos sacrificar nuestros vestidos durante la época de frío, si tenemos un calzado que nos acompañe para mantenernos en calor. Las botas altas hasta la rodilla, con punta fina, son aliadas para todo tipo estatura.
Si hablamos de contraste de vestidos con botas, este es uno de ellos. Una prenda con ese corte, estilo y color ultra femeninos, en combinación con unas botas de broches, un poco cowboy, hacen que esta composición se endurezca un poco, sin perder su toque sutil. Si eres petite, apuesta por unas botas cowboy con la v al final de ellas, para que no pierdas centímetros de altura.
De alguna forma este podría ser un look inesperado. Otro vestido muy delicado y ‘lady like’ en combinación con unas robustas botas militares. La falda con transparencia (o con una abertura en el medio, como en la primera foto), lo hace un atuendo que puede ser usado hasta por chicas de baja estatura. Desde donde acaba la bota, hasta donde se ve el forro del vestido, se observa un largo considerable de la pierna que no hará verte más pequeña.
Si todavía el frío te lo permite, hazte con ese vestido corto y combínalo con botas hasta la media pierna (si eres petite, justo por encima de los tobillos). Estarás a tiempo de estirar un poco más esos días de clima agradable, lucir tus piernas y, si llueve un poco, estarás protegida con tus botas. El equilibrio aquí lo tenemos, por supuesto, en el abrigo. Es la prenda que genera un balance entre el corto del vestido y el calzado que llevas.
Con información de Vogue