A veces, el placer tiene un precio muy caro que, cuando menos lo esperas, pagarás sin remedio si no lo haces con cuidado. Sólo recuerda que muchos de ellos puedes evitarlos.
Prevenir riesgos mientras tienes sexo, hoy en día, es mucho más fácil que en los tiempos de tus padres. Conocer experiencias y tener a la mano información al respecto son ventajas que debes sacarles provecho para salir triunfante y, sobre todo, sano y salvo.
Estas son cuatro de las principales contingencias sexuales, las cuales, como siguen ocurriendo, es básico que sepas para que a ti no te sucedan.
Que el condón se rompa o quede dentro de la vagina
Las muchas probabilidades de que el semen se vierta dentro de tu chica son las mismas en ambos accidentes. Que el preservativo se rompa sucede cuando no hay buena lubricación, si elegiste una talla más chica (pues se tensa hasta romperse por la fricción) o que esté caducado. También porque no estuvo guardado en un lugar oscuro, fresco y seco, y sí donde hay calor o estuvo expuesto a la luz del sol. ¿Más razones? Si lo metiste en tu cartera por mucho tiempo o porque lo colocaste en tu miembro incorrectamente.
El segundo incidente puede ocurrir si el condón te queda más grande o el pene no está bien erecto. Las consecuencias son realmente lamentables, y van desde un embarazo no deseado, hasta la infección de una enfermedad de transmisión sexual (ETS) de muy graves consecuencias.
Infección de VPH y otras ETS
Virus del Papiloma Humano o VPH: De los demás virus, es el que se contagia con más frecuencia (existen 200 genotipos de VPH y 40 afectan la zona genital); el 70% de las personas sexualmente activas lo tiene, pero en la mayoría de los casos no presenta síntomas y desaparece por sí solo; el resto es una probable causa de cáncer en el pene o, si hubo sexo oral con una persona infectada, cáncer en la garganta. La transmisión ocurre si hay contacto con la piel de los genitales, del ano y de la boca, ya sea por la penetración con el miembro o una manipulación intensa durante el acto sexual. Aunque el condón es la opción más efectiva, puedes contraerlo sin él, ya que es posible a través de la piel que rodea la raíz del falo, una zona que no está protegida.
Cuando hay síntomas, éstos pueden darse después de meses o años de haber adquirido el virus y es posible que manifieste verrugas en forma de bultos o racimos en el área genital. Por eso, es necesario estar atento a cualquiera de estos detalles para que un doctor se haga cargo de ello.
¿Cómo evitarlo?
Hay una vacuna y ésta puede aplicarse en los hombres entre los 9 y 26 años de edad y en las mujeres entre los 9 y 45. Nos protege de nueve tipos de VPH: el 16 y el 18 son los que en el 80% de los casos provocan cáncer cervical; 6 y 11, por los que aparecen verrugas, y 31, 33, 45, 52 y 58 pueden causar cáncer de garganta, en el cuello uterino, vulva/vagina, el ano o el pene. A pesar de que el condón no garantiza estar 100% a salvo del virus, no dejes de usarlo, pues reduce en mucho la incidencia y también es muy efectivo contra las infecciones que ahora te enumeraremos.
Recuerda usar condón siempre.
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Enfermedades de Transmisión Sexual
Existen más de 20 enfermedades de transmisión sexual y las más frecuentes (entre ellas el VPH) son: clamidia, herpes genital, gonorrea, VIH/SIDA, sífilis y tricomoniasis.
Estas ETS son causadas por virus, bacterias o parásitos, y a partir de ello, debes saber que las que son por parásitos o bacterias, se tratan con antibióticos, y las provocadas por algún virus no tienen cura; sin embargo, hay medicamentos que ayudan a disminuir los síntomas y a controlarlas. Las vías son las mismas: anal, vaginal y oral.
¿Cómo evitarlas?
Sin duda, con condón, ya sea femenino o masculino. ¿Lo ideal? Consulta a un médico especialista y te dirá (y practicará) si hay métodos de detección; algo ultra importante para tratarte y cuidar a tus parejas sexuales. Además, ten en cuenta todos aquellos errores al usar condón y que debes evitar.
Alergia al semen
También llamada hipersensibilidad, es causada por la proteína PSA integrada en el líquido seminal, incluso en el que es segregado antes de la eyaculación. La mayoría de las mujeres que la padecen tienen entre 20 y 30 años de edad y es más frecuente cuando ellas presentan otro tipo de alergias, como rinitis o asma, hecho que confirma la predisposición a ser sensibles a otro alergeno.
Los síntomas, como picazón, mucho ardor y edemas en la vulva y la vagina, pueden confundir a la afectada creyendo que se trata de una vaginitis; por esta razón, es esencial visitar al ginecólogo para salir de dudas. Sin embargo, entre los indicios puede estar la dificultad al respirar, vómito, urticaria o hasta un choque anafiláctico, en el que hay una rápida baja de presión arterial de consecuencias mortales; motivos que revelan que existe una alergia.
¿La solución?
Nuevamente, el condón es la respuesta, y si se manifiesta, el especialista sugerirá un tratamiento que consiste en antihistamínicos o corticoides si los síntomas son locales y leves; también para la hinchazón. Ante los más graves, ayudará la epinefrina, la adrenalina o los corticoides.
Fractura de pene
Es posible una fractura de pene aunque no haya hueso, es posible que ocurra y es cuando está erecto. Para empezar a entenderlo, sabrás que el miembro tiene dos cilindros o cuerpos cavernosos, los cuales hacen que se yerga. Pero si el falo se dobla brusca y repentinamente, los revestimientos de estos cuerpos pueden romperse, provocando una lesión realmente dolorosa, hematomas evidentes en la piel (la sangre sale del cilindro) y es de atención médica urgente para solucionarse quirúrgicamente, de ahí que se clasifique como uno de los riesgos a la hora del sexo. También suele pasar si se practica una masturbación muy agresiva. Así que cuida que la cabalgata sea acompasada y sin brusquedad.
Con información de GQ
