El presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, se reunirá con los trabajadores sanitarios que han estado en primera línea de la crisis del coronavirus en un evento virtual el miércoles, mientras el mandatario saliente, Donald Trump, amplía su campaña para revertir su derrota electoral.
Trump se ha negado a aceptar la derrota en la elección del 3 de noviembre, impidiendo una transición fluida a un nuevo gobierno. Biden se ha comprometido a convertir la pandemia, que ha acabado con la vida de más de 247 mil personas en Estados Unidos y ha costado millones de empleos, en una prioridad máxima cuando asuma el cargo el 20 de enero.
Biden y sus principales asesores han advertido que el desafío de Trump podría complicar los esfuerzos para contener el aumento de casos de COVID-19 y la planificación de la distribución de la vacuna.
Este sentimiento encontró eco el martes en tres organizaciones de salud líderes, que se dirigieron directamente al presidente en una carta abierta en la que le instaron a compartir datos críticos del COVID-19 con el equipo de Biden.
“Como proveedores de cuidado para todos los estadounidenses, vemos el sufrimiento que están pasando nuestras comunidades por el COVID-19. Desde esta perspectiva humana de primera línea le instamos a compartir datos e información críticos lo antes posible”, dijo la carta, firmada por los jefes de la Asociación Médica de Estados Unidos, la Asociación de Enfermeras de Estados Unidos y la Asociación de Hospitales de Estados Unidos.
Mientras, Biden participará en la mesa redonda virtual desde Delaware el miércoles, Trump vuelve a no tener actos públicos agendados.
Trump asegura sin pruebas que fue privado de la victoria electoral por un fraude generalizado y ha presentado una ola de demandas que han sido rechazadas en su mayoría por los jueces.
Biden ganó el voto popular a nivel nacional por más de 5,6 millones de votos, o 3,6 puntos porcentuales, mientras siguen recontándose aún algunos votos. En el Colegio Electoral, que reúne los resultados estatales y determina al ganador, Biden obtuvo 306 votos frente a los 232 de Trump.
Para permanecer en el cargo, Trump tendría que anular los resultados en al menos tres de los estados más disputados de una forma sin precedentes para alcanzar el umbral de los 270 votos electorales.
Los estados tienen de plazo hasta el 8 de diciembre para certificar los resultados electorales, a tiempo para la votación del Colegio Electoral el 14 de diciembre.
El Congreso tiene previsto contar los votos del Colegio Electoral el 6 de enero, que suele ser una formalidad. Sin embargo, los seguidores de Trump en el Senado y la Cámara de Representantes podrían objetar los resultados en un desesperado intento final por privar a Biden de su victoria y llevar la decisión última a la Cámara alta.
Trump despidió el martes al principal funcionario de ciberseguridad, que había irritado al mandatario al negarse a respaldar sus acusaciones de fraude electoral.
Chris Krebs fue cesado como jefe de la Agencia de Ciberseguridad e Infraestructura de Seguridad del Departamento de Seguridad Interior. Su trabajo en la protección de los comicios frente a los hackers y en el combate contra la desinformación fue alabado por legisladores de ambos partidos, así como autoridades electorales de todo el país.
Con información de UnoTv