En todo el mundo se sabe que el ácido acetilsalicílico, mejor conocido como aspirina, es excelente para tratar el dolor de cabeza, este medicamento parece tener muchas más bondades y usos de los que nos podemos imaginar y ahora, uno de ellos ha mostrado evidencias.
Un estudio realizado por la Universidad de Sydney, en Australia encontró que tomar aspirina ayuda a reducir los síntomas de depresión y ansiedad, además de minimizar el riesgo de sufrir un infarto durante el duelo por la muerte de un ser querido. A esto hay que agregar los beneficios que aporta a la salud cardiovascular.
La investigación publicada por la revista médica American Heart Journal detalla que los investigadores descubrieron que el medicamento mejora y/o mantiene estable la frecuencia cardiaca y la presión arterial, lo que hace que las personas que lo consumen tengan menor probabilidad de sufrir un infarto cardiaco.
El equipo científico a cargo de la investigación evaluó y dio seguimiento a la salud de 85 personas que habían sufrido recientemente un pérdida familiar; 42 recibieron dosis bajas de medicamento, y los otros tomaron placebos. Los resultados mostraron que el primer grupo tuvieron niveles reducidos de ansiedad.
Adicionalmente, se encontró que los pacientes que estuvieron medicados continuaron con los posibles beneficios de la aspirina hasta seis semanas después de que el tratamiento fue retirado.
Aunque los resultados son esperanzadores, los investigadores aceptan que aún es necesario realizar más estudios que permitan identificar qué clase de personas y bajo qué diagnósticos o contextos, el fármaco podría fungir como auxiliar en el tratamiento de la ansiedad y la depresión, pero dejaron ver que sería una buena opción para prevenir, no sólo para corregir.