La policía chocó el lunes con manifestantes por segunda noche consecutiva en un suburbio de Minneapolis donde una policía mató de un disparo a un hombre negro durante una parada de tráfico el fin de semana. El jefe de policía dijo que al parecer, la agente pretendía disparar una pistola eléctrica, no un arma de fuego, cuando el hombre forcejeaba con otros agentes.
El jefe de la policía de Brooklyn Center, Tim Gannon, describió la muerte el domingo de Daunte Wright, de 20 años, como “un disparo accidental”.
Su fallecimiento desató protestas y disturbios en un área metropolitana ya de por sí bajo intensas tensiones debido al juicio al primero de los cuatro policías acusados de la muerte de George Floyd.
Cientos de manifestantes se encararon con la policía en Brooklyn Center tras cae la noche el lunes, horas después de que el gobernador anunciara un toque de queda del anochecer al amanecer. Cuando la multitud no se dispersó, la policía empezó a lanzar latas de gas lacrimógenos y granadas aturdidoras, y persiguió a algunos manifestantes. Policías con material antimotines colocados en una larga fila, que golpeaban de forma rítimica sus porras, comenzaron a avanzar despacio para hacer retroceder a la gente que quedaba.
“¡Retrocedan!” exclamaba la policía. “¡Manos arriba! ¡No disparen!” respondía la gente.
Para las 22:00 apenas quedaban unas docenas de personas.
Las fuerzas de seguridad habían reforzado su presencia en la zona de Minneapolis tras los incidentes violentos del domingo. Se esperaba que para el lunes por la noche hubiera más del doble de guardias nacionales desplegados, más de mil.
Las autoridades publicaron imágenes de las cámaras corporales de los agentes en las que se oía a la agente que disparó gritando a Wright mientras la policía trataba de detenerle.
“¡Voy a aplicarte la pistola aturdidora! ¡Voy a aplicarte la pistola aturdidora! ¡Taser! ¡Taser! ¡Taser! (la marca de la pistola)”, grita la agente policial. Ella desenfunda su arma después de que el hombre logre zafarse de la policía junto a su auto y vuelva a colocarse frente al volante.
La policía hace un disparo con su arma de fuego, el automóvil se aleja a toda velocidad y se escucha a la agente policial decir: “¡Santo (palabra soez)! Le disparé”.
El alcalde de Brooklyn Center, Mike Elliott, describió el tiroteo como “profundamente tráfico” y dijo que la agente debía ser despedida.
Elliott anunció más tarde que el consejo municipal había votado para dar al alcalde “autoridad de mando” sobre el departamento de policía.
Esto “acelerará las cosas y establecerá una cadena de mando y liderazgo”, escribió en Twitter. También dijo que el gerente municipal había sido despedido y su número dos asumiría sus funciones.
Brooklyn Center es un modesto suburbio al norte de Minneapolis que ha experimentado un cambio demográfico drástico en los últimos años. En 2000, más del 70% de la ciudad era blanca. Ahora, la mayoría de los residentes son negros, de raíces asiáticas o latinos.
Eliott, el primer alcalde negro de la ciudad, llegó al país de niño como inmigrante desde Liberia. El lunes por la noche se dirigió a la multitud cerca de la comisaría junto a Keith Ellison, el primer secretario de Justicia negro del estado. Dijo a los manifestantes que hicieran oír su voz, pero se mantuvieran a salvo.
“Vamos a llegar al fondo de esto, vamos a asegurarnos de que hay justicia, de que se exigen responsabilidades a los agentes”, dijo Elliott a la multitud, según un video compartido por un periodista de la televisora de Minneapolis KARE.
Ellison recordó a la gente que dirige la acusación contra el primer agente acusado por la muerte de Floyd y prometió que la muerte de Wright “no se barrerá bajo la alfombra”.
Organizadores del Movement for Black Lives, una coalición nacional de más de 150 organizaciones activistas y políticas negras, señalaron a la muerte de Wright como otro motivo por el que las ciudades deben aceptar las propuestas de reducir los fondos a un “sistema racista, roto de forma irreparable”.
Las imágenes de la cámara corporal mostraban a tres agentes en torno a un auto parado, que según las autoridades recibió el alto por unas matrículas caducadas. Cuando un agente intenta esposar a Wright, otro le dice que se les está arrestando por una orden pendiente. Entonces comienza el forcejeo y se produce el disparo. Después el auto recorre varias cuadras antes de chocar con otro vehículo.
Wright murió de un disparo en el pecho, según un comunicado del forense del condado de Hennepin.
La Oficina de Detención Penal, que investiga el tiroteo, identificó a la agente que disparó como Kim Potter, con 26 años de experiencia y que quedó de baja administrativa.
Registros judiciales mostraban una orden de búsqueda contra Wright por no comparecer ante una corte para afrontar cargos de huir de la policía y poseer un arma sin permiso durante un encuentro con la policía de Minneapolis en junio.
Los periodistas de Associated Press Scott Bauer en Madison, Wisconsin, Tim Sullivan en Minneapolis, Aaron Morrison en Tulsa, Oklahoma, y Jonathan Lemire en Washington contribuyeron a esta nota