A casi una semana de su formación el socavón gigante registrado en el estado de Puebla está a punto de ‘tragarse‘ una casa.
Primeras investigaciones apuntan a que el socavón se formó a consecuencia de una falla geológica o por la explotación de mantos acuíferos.
De los cinco metros su diámetro ha crecido hasta alcanzar casi los 100 metros, en tanto que se presume que su profundidad es de entre 15 y 20 metros.
El desprendimiento de tierra se dio en un terreno de cultivo del municipio Juan C. Bonilla, a poco más de 20 kilómetros de Puebla capital, en una zona donde solamente hay algunas casas pequeñas y humildes de las personas que trabajan los sembradíos.
Protección Civil de Puebla y del Gobierno Federal implementaron un cordón de seguridad en el predio donde se abrió el socavón, y desalojaron una casa que está a punto de ser ‘devorada’.
Además, en coordinación con la Secretaría de Medio Ambiente se integró un grupo interinstitucional para hallar el origen del fenómeno.
Magdalena Xalamihua, propietaria de la casa que podría perderse por el socavón, detalló que antes de la formación del hoyo olía a azufre y se escuchaban olas de debajo de la tierra.