Siempre se relacionó a la política con el narcotráfico, pero posiblemente la corrupción no había sido tan “publica” quizás gracias a las redes sociales y/o la facilidad de que ahora todos tenemos una cámara fotográfica o de vídeo en la palma de la mano las 24 horas sin contar que ahora en segundos la imagen estará al alcance de millones de personas de todas partes del mundo.
Guardando las medidas proporciones << por que definitivamente en todas las historias entre los personajes hay niveles >> Los señalamientos de narcoelecciones en la república mexicana desde el 6 de junio nos invitan a recordar una se las narcoelecciones más documentadas de la historia. La de Pablo Escobar
En varios archivos del FBI se hace referencia al proceso electoral de 1990, en el que al parecer varios políticos se beneficiaron con los dineros del ‘capo’.
El 4 de abril de 1990, varios días después de realizadas las llamadas elecciones de mitaca, en las cuales se elegía a Senadores y Representantes a la Cámara, una fuente entrevistada por la Federal Bureau of Investigation (FBI) aseguró que el narcotraficante Pablo Escobar Gaviria habían financiado algunas campañas políticas.
Las elecciones celebradas el 11 de marzo de 1990 se dieron en medio de una caótica situación de seguridad y orden público: fue el primer Congreso elegido luego del asesinato de Luis Carlos Galán, ocurrido el 18 de agosto de 1989 y Escobar Gaviria había desatado una guerra cruenta para acabar con la extradición narcotraficantes hacia aquellos países que los requerían para que respondieran por delitos asociados al narcotráfico.
Según constataron los agentes federales a partir de la información de la fuente entrevistada, “varios políticos de Antioquia ganaron asientos en el Senado” y agrega que también lograron tener algunos cargos de representación en el “Gobierno de Colombia”. De acuerdo con la información consignada por el FBI, todos ellos “representan al Partido Liberal y sus campañas fueron asistidas por el grupo de Escobar”. Para la época referenciada por los agentes federales, estaba llegando a su fin el mandato el presidente Virgilio Barco Vargas.
En 1982, Escobar Gaviria había resultado elegido Representante a la Cámara suplente de Jairo Ortega Ramírez por un movimiento conocido como Alternativa Liberal y que tuvo afinidades ideológicas con el Nuevo Liberalismo, que lideraba el carismático líder político Luis Carlos Galán, quien luego de valorar la información que se divulgaba sobre el narcotraficante decidió expulsarlos de esas toldas. Luego, por decisión de la Cámara, el ‘capo’ perdió su inmunidad parlamentaria en octubre de 1983.
Para 1990, la época referida por el FBI y sus fuentes, Escobar Gaviria se encontraba en plena guerra contra el gobierno nacional con el fin de impedir la extradición de narcotraficantes colombianos a otros países, particularmente a Estados Unidos, y actuaba desde la clandestinidad.
Al respecto, los agentes federales reseñaron en su informe que Pablo Escobar y otros de quien no dicen los nombres “se han visto obligados a reducir sus movimientos” en Medellín. Y añade el documento que “debido a la presión de aplicación de la ley la mayoría de los miembros del cartel de Medellín, entre ellos el grupo de Escobar, han trasladado sus operaciones de procesamiento y envío (de cocaína) a Ecuador y Bolivia, y están enviando directamente desde estos dos países”.
La razón que dieron los investigadores del FBI para explicar el traslado de los narcotraficantes antioqueños a Ecuador y Bolivia es que en esos países, para esa época, “la aplicación de la ley es poco estricta”, y por tal motivo era propicio para crean grandes laboratorios para el procesamiento de cocaína.
No obstante, la persecución contra Escobar Gaviria continuaba en Medellín y las autoridades tenían información que se movía en áreas muy reducidas, y era ayudado por un grupo de confianza que lo mantenía al tanto de los movimientos de la Fuerza Pública.
De acuerdo con el FBI, uno de los hombres de confianza de Escobar Gaviria era un Representante a la Cámara. Su nombre aparece tachado en el cable de esta agencia federal, pero lo que pudieron establecer los investigadores era que “recientemente había ganado un escaño como representante en la Cámara de Representantes de Colombia” y su campaña habría recibido “más de diez millones de pesos”.
De acuerdo con la información que estableció la agencia federal de Estados Unidos con sus fuentes, este Representante a la Cámara previno al narcotraficante antioqueño de un operativo que preparaban las autoridades para capturarlo y que se adelantaría en dos lugares que fueron identificados como “La Colina” y “La Setenta”, sin que se estableciera exactamente a qué se referían, si a fincas o a barrios de la capital antioqueña. “La fuente cree que avisó a Escobar de la acción”, dice el informe del FBI. “Se dio cuenta de los movimientos de tropas e inmediatamente alertó a Escobar”.
Un aspecto interesante de este informe del FBI del 17 de abril de 1990 es que contenía los nombres de varios políticos, pero fueron tachados. La frase textual del documento dice lo siguiente: “Otros políticos del departamento de Antioquia ayudados por Escobar y otro (cuyo nombre fue excluido) en las recientes elecciones de 1990 son: …”. Y el espacio aparece en blanco. De donde se infiere que las autoridades norteamericanas identificaron a los políticos, pero se han abstenido de revelar sus nombres.
Una revisión a los resultados electorales celebrados el 11 de marzo de 1990, que serían a los que hace referencia el documento del FBI, permite establecer que los Senadores electos en Antioquia por diferencias fracciones del Partido Liberal fueron: Álvaro Uribe Vélez, por el sector Democrático; Armando Estrada Villa, Bernardo Guerra Serna y Darío Londoño Cardona, Directorio Liberal de Antioquia, sector del Guerrismo; Federico Estrada Vélez, por el sector conocido como Federiquismo; y William Jaramillo Gómez, por el sector del Jaramillismo.
Los Representantes a la Cámara electos por Antioquia en esas elecciones en representación de diversos sectores del Partido Liberal fueron: Alberto Agudelo Solís, Jaime Henríquez Gallo y León Arango Paucar, del Directorio Liberal de Antioquia; Alberto Díaz Muñoz y Mario Uribe Escobar, del sector Democrático; César Augusto Pérez García, de Convergencia Liberal; y Silvia Mejía Duque, del Nuevo Liberalismo, sector Galanista.