Andrés Manuel López Obrador, insistió que su Gobierno no permitirá la destrucción de la Sierra de San Miguelito, para beneficiar a grupos empresariales que pretenden crear fraccionamientos caros en una extensión de 1,805 hectáreas.
Esta mañana, en conferencia nacional, el periodista Julio Astillero exhibió el conflicto que existe en torno a las presiones de empresarios y grupos inmobiliarios para apoderarse de casi 2 mil hectáreas de Sierra, para llevar a cabo proyectos de construcción.
Con documentos en mano, Astillero hizo valer su derecho de réplica, después de que una investigación en su portal de noticias, fue calificada como información falsa.
Ahí, expuso que la SEMARNAT dio adelantos de un reporte técnico para la preservación de la Sierra de San Miguelito, como área natural protegida, en la que se excluyen esas 1,805 hectáreas que pertenecen a la Cañada de Lobo, y en la que empresarios tienen interés de construir el fraccionamiento Residencial Cañadas.
Denunció la presión a representantes ejidales con dinero en efectivo, para asegurar que comuneros firmen y se muestren a favor de ceder la extensión territorial a los deseos empresariales, a través de la Asamblea General.
Andrés Manuel López Obrador, reiteró que por el interés de la nación, a pesar de que ejidatarios voten a favor de favorecer a las inmobiliarias, no se autorizará ningún permiso ni respaldarán dichas acciones.
Agregó que la actual titular de la SEMARNAT, Maria Albores, es una persona incorruptible y que tiene una amplia trayectoria en la defensa del medio ambiente, por lo cual, es imposible pensar que ella acordaría con poderes económicos para permitir la destrucción de la Sierra de San Miguelito.