Luego de que integrantes de la Sección VII de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) bloquearon la entrada de Andrés Manuel López Obrador a la reunión de seguridad y su conferencia mañanera, el mandatario se enlazó en una videollamada para asegurar que “el presidente no puede ser rehén de nadie”.
“Me da gusto poderme comunicar con ustedes en una situación algo especial, pero tenemos que realizar esta mañanera”, comenzó López Obrador.
“Ya informó el secretario de la defensa. Yo estaba a punto de llegar a este cuartel general en Tuxtla (Gutiérrez), para participar de 6 a 7 de la mañana en la reunión de seguridad y luego en la mañanera, pero a la entrada del cuartel, un grupo de maestros de la CNTE de Chiapas, nos impidieron la entrada bajo la condición de que tenía que atenderlos de inmediato y resolverles sus peticiones”, señaló.“Esto no lo puedo permitir porque el presidente no puede ser rehén de nadie… Hemos atendido a los maestros de México, los vamos a seguir atendiendo, he hablado con la CNTE como en ocho o en diez ocasiones que me he reunido con ellos.. pero en el caso de Chiapas y también en Michoacán hay intereses creados. Esto no tiene que ver con el magisterio (…) Yo no puedo someterme a ningún grupo de intereses creados… Entonces decidí permanecer aquí, no voy a entrar por la fuerza.. no son verdaderamente muchos, podría entrar a llevar a cabo la conferencia, pero decidí no hacerlo, es como una protesta de mi parte para que estos grupos no se excedan, no abusen, porque esto que están haciendo es completamente ilegal, indebido”, enfatizó.
López Obrador reconoció que los inconformes tienen derecho a manifestarse, pero destacó que este bloqueo no es la forma.
“(…) Desde luego que tienen derecho a manifestarse y se los vamos a respetar siempre, pero nosotros no somos iguales a los gobiernos corruptos, yo no tengo nada de qué avergonzarme, al contrario, ayudamos a cancelar la mal llamada reforma educativa, se ha respetado al magisterio, no se les maltrata, no es igual que antes (…) Todos los que fueron despedidos con la mal llamada reforma educativa ya están reinstalados, hemos avanzado en la pacificación de maestros, como nunca se están apoyando a estudiantes (…) como nunca están llegando presupuestos de manera directa a las escuelas… En fin, no tenemos pendientes con los maestros. esto es un asunto más de intereses políticos”, enfatizó.
El Jefe del Ejecutivo federal hizo un llamado a la base del magisterio chiapaneco para que analicen la situación y si él -en su calidad de mandatario-, merece ese trato, al tiempo que aseguró, tiene la conciencia tranquila.
“A mí me gustaría que los maestros de Chiapas, las bases, analizaran esta situación, si es correcto lo que están haciendo y si yo merezco que se me dé este trato.. Vamos a estar aquí el tiempo que sea necesario, le pido a la gente que no se impaciente, que ni se preocupe de nada, tengo mi conciencia tranquila y además estoy acostumbrado a enfrentar este tipo de asuntos y por la dignidad de la investidura presidencial, no puedo someterme a chantajes de nadie, yo no establezco relaciones de complicidad mafiosas con ningún grupo de interés creado”, aseveró.
López Obrador les ofreció un diálogo con la titular de la Secretaría de Educación, Delfina Gómez para solucionar sus peticiones.
“(…) Ellos quieren que aquí mismo les resuelva el problema y si no nos dejan pasar, pues aquí me quedo el tiempo que sea necesario… Si me permiten, vamos a continuar mi gira, vamos a estar más tarde en San Cristóbal (…)”, señaló.
Por último, el mandatario reiteró que no se someterá a chantajes, al tiempo que, aseguró, eso es lo que hacían pacifistas como Nelson Mandela o Martin Luther King.
“(…) Esto es parte del proceso de transformación que se está llevando a cabo. Están enfrente de un cuartel militar, no utilizar la fuerza, no someternos a chantajes de estos grupos y resistir… esto es lo que hacía Mandela, lo que hacía Luther King, lo que hacía Gandhi sobre todo… la no violencia. Decía Juárez: ‘Nada por la fuerza, todo por la razón y el derecho’. Un abrazo afectuoso a todos”, finalizó.
Luego de más de dos horas de estar retenido a bordo de su camioneta, Andrés Manuel López Obrador, pudo ingresar a la séptima Zona Militar en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.