Este 11 de septiembre, se cumplen 20 años de los ataques terroristas a las Torres Gemelas, por lo que se llevará a cabo la ceremonia conmemorativa de las víctimas en el Museo y Memorial Nacional del 11-S, en Nueva York. Independientemente de la tragedia humana y de lo que significó para los Estados Unidos, el efecto dominó de estos ataques, dos décadas después, sigue moviendo las fichas de la geopolítica.
Los 19 yihadistas suicidas de Al Qaeda utilizaron cuchillos para alfombras para someter a la tripulación de los 4 aviones que estrellaron en las Torres Gemelas, el Pentágono y Pensilvania, por lo que se cambiaron totalmente las reglas y métodos de seguridad internacionales para la aviación y la migración a nivel mundial.
Tras los atentados de 2001, el presidente George Bush declaró la “Guerra contra el terrorismo” y en octubre de ese año comenzó la “Operación libertad duradera” en Afganistán, invasión que se convirtió en la guerra más prolongada librada por Estados Unidos, y sus aliados de la OTAN y otras naciones, con miles de muertos, heridos y desaparecidos.
En enero de 2002, el ejército de Estados Unidos abrió una cárcel en su base de la Marina en Guantánamo, exclusiva para “sospechosos islámicos”, 800 personas estuvieron ahí con interrogatorios bajo tortura.
Estados Unidos y aliados invaden Irak en 2003, por reportes de armas de destrucción masiva. Saddam Hussein fue derrocado, detenido, enjuiciado y asesinado; el conflicto favoreció la aparición de un autodenominado “Estado Islámico” entre Irak y Siria, del que seguimos viendo sus efectos, por ejemplo en la guerra de Siria o bien en la llamada Primavera Árabe.
La guerra contra el terrorismo trae avances tecnológicos exhibidos en 2011 cuando Estados Unidos desató la guerra de los drones en Yemen. Ese mismo año, asesinó con Marines en naves tripuladas “Invisibles al radar” a Osama Bin Laden.
Y a lo largo de casi 20 años, la misma guerra desató una serie de atentados terroristas en Europa a gran escala, que comenzaron en el Metro de Madrid el 11 de marzo de 2004 con cerca de 200 muertos, los de julio de 2005 en Londres, en el Metro de Moscú en 2010 y los peores, en París, en enero de 2015 contra la revista Charlie Hebdo y el 13 de noviembre del mismo año en las calles de la capital francesa.
El 11-S también exhibe las tácticas de intercambio de información en esta guerra, desnudadas por los cables de Wikileaks desde 2010, o en la entrega del ex empleado de la Agencia de Seguridad Nacional estadounidense, (NSA), Edward Snowden, de un programa de espionaje mundial a gran escala orquestado por la inteligencia de Estados Unidos.
Entre 2018 y 2019, Donald Trump negocia y pacta con los talibanes el retiro de Afganistán y solo deja 2 mil 500 soldados, de los 14 mil enviados a la guerra; en semanas recientes, en medio de la salida de dichos militares, los talibanes conquistaron Afganistán.
Este sábado 11 de septiembre de 2021, ese país amanece con un gobierno encabezado por los talibanes y Estados Unidos conmemora 20 años de los ataques que cambiaron su historia y la del planeta.