Los asesinos seriales no sólo existen en el mundo de la ficción o en otros países, sino que México ha sido testigo de varios crímenes de este tipo. El tema de los asesinos seriales no es algo a lo que está ajeno México, pues sus calles también han sido escenarios perfectos para estos criminales. ¿Conoces o recuerdas a uno? A continuación, te los mencionamos.
A lo largo de esta semana, se dieron a conocer dos casos de asesinos seriales: Andrés ‘N’ y Arturo ‘N’, quienes han sido señalados como feminicidas seriales de Atizapán y de la CDMX, respectivamente.
Hasta el momento, autoridades correspondientes se han dedicado a investigar ambos casos para identificar a las víctimas y la condena que los criminales recibirán.
Sin embargo, la lista de asesinos seriales en México no empieza con ellos, pues en el pasado ya se han tenido registros de otros, los cuales se volvieron famosos.
El año pasado, se dieron a conocer dos casos de asesinos seriales: Andrés ‘N’ y Arturo ‘N’, quienes han sido señalados como feminicidas seriales de Atizapán y de la CDMX, respectivamente.
Hasta el momento, autoridades correspondientes se han dedicado a investigar ambos casos para identificar a las víctimas y la condena que los criminales recibirán.
Sin embargo, la lista de asesinos seriales en México no empieza con ellos, pues en el pasado ya se han tenido registros de otros, los cuales se volvieron famosos.
Pancho López
Fernando Hernández Leyva, mejor conocido como Pancho López, fue arrestado en el año de 1999 y hasta la fecha se encuentra en el Centro Federal de Readaptación “El Altiplano.
La lista de crímenes que realizó es larga, pues según sus acusaciones, cometió más de 137 asesinatos, seis secuestros y más delitos a lo largo del territorio mexicano. De acuerdo con un examen psicólogo, fue señalado como un psicópata, pues sólo lo hacía por satisfacción personal.
La Mataviejitas
Un caso sumamente sonado por lo aterrador fue el de “La Mataviejitas”, identificada como Juana Dayanara Barraza Samperio. Su historia ha sido de las más aterradoras en México pues se le adjudicó 17 homicidios y 12 robos, aunque se piensa que fue autora de más de 40 asesinatos.
“La Mataviejitas” se dedicada a la lucha libre, por lo que peleó con el nombre de “La Dama del Silencio”, pero fuera del ring se hacía pasar por enfermera que cuidaba a mujeres ancianas.
Una vez que las mujeres de avanzada edad la dejaban pasar a sus respectivas casas, estas las asesinaba a golpes, con armas punzocortantes o estrangulación. Actualmente, cumple su condena de 759 años en prisión en el penal de Santa Martha Acatitla.
El “caníbal de la Guerrero”
José Luis Calva Zepeda, también conocido como “El poeta caníbal”, era un escritor de novelas, poemas y obras de teatro que normalmente transitaba por las colonias Condesa, Roma y en el tianguis del Chopo. No obstante, llevaba una segunda vida.
Calva Zepeda fue autor de tres asesinatos de mujeres, de las que también se presume se comió parte de sus cuerpos.
En el 2007 fue arrestado, pero mientras se realizaba la investigación en la casa del asesino, la policía encontró el cuerpo de la madre de sus hijos en partes; había partes en el refrigerador, carne en el sartén y el tronco del cuerpo dentro del armario.
El “Narcosatánico” y la “Madrina”
El Narcosatánico, identificado como Adolfo de Jesús Constanzo, fue líder de la secta “Los narcosatánicos”, la cual no sólo se dedicaba a traficar droga, sino que a la par realizaban sacrificios humanos.
La policía descubrió esta aterradora secta en 1989 cuando detuvieron a un miembro de la secta fue detenido y confesó todo, incluso, llevó a la policía hasta el punto de reunión de la secta.
A este grupo criminal se unió Sara Villareal Aldrete, conocida como “La Madrina”, quien se encargaba de realizar todos los rituales y sacrificios humanos. De acuerdo con los testimonios, se torturaban a las personas, mientras que su sangre y cerebro eran consumidos por los miembros para protección.
Por su parte, Adolfo Constanzo pidió que se le asesinara para evitar su captura, mientras que “La Madrina” se encuentra en prisión tras recibir una condena de 647 años en prisión.
El Sádico
Raúl Osiel Marroquín Reyes, apodado como “El Sádico”, fue encargado de asesinar a hombres homosexuales dentro de la Ciudad de México. A sus víctimas las buscaba en la Zona Rosa y tras invitarlos a salir, los llevaba a un lugar para torturarlos hasta matarlos.
Pero sus crímenes iban más allá de matar a los hombres, ya que descuartizaba los cuerpos y los restos los colocaba en maletas que tiraba en la colonia Asturias o cerca del metro Chabacano.
Fue arrestado en el 2006 y recibió 128 años en prisión como condena debido a los seis secuestros y cuatro homicidios que cometió.