El Partido Acción Nacional (PAN) presentó ante la Fiscalía General de la República (FGR) una denuncia por los presuntos actos de corrupción y tráfico de influencias por parte de José Ramón López Beltrán, hijo del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Marko Cortés Mendoza, dirigente nacional del PAN, pidió que “se investigue el origen de los recursos de las lujosas casonas de Houston que fueron exhibidas a través de los medios de comunicación y, además, que se investigue todo lo relacionado a los contratos de las empresas proveedoras de Pemex”.
“Ya basta del engaño, de la mentira, de ese discurso falso de austeridad y de honestidad, que, con estos hechos, simplemente se van por la borda, por lo que exigimos una respuesta puntual del Presidente López Obrador”, enfatizó Cortés Mendoza.
En la conferencia de prensa del partido, donde anunciaron la presentación de la denuncia, estuvieron acompañando al dirigente nacional, Cecilia Patrón, secretaria general; Julen Rementería, coordinador del PAN en el Senado; diputados locales; y, militantes que también firmaron el documento.
“Cada vez es más evidente que la austeridad y la honestidad de este Gobierno son puro cuento. El cuento más contado, pero también, el cuento más falso de todos. López Obrador dijo que iba a barrer la corrupción de arriba abajo, pero fue puro cuento. Lo que hizo fue cubrir a sus hijos, a sus hermanos, a sus parientes, y a todos sus consentidos y colaboradores cercanos con el tapete de la impunidad”, declaró el dirigente en la conferencia de prensa.
Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), junto con Latinus, afirmaron el fin de semana que José Ramón López Beltrán, hijo de López Obrador, “ha ocupado con su pareja Carolyn Adams dos residencias al norte de Houston, cada una con valor comercial cercano al millón de dólares”.
De acuerdo con la investigación publicada el viernes 28 de enero, López Beltrán vivió en Houston en una propiedad de un alto directivo de Baker Hughes, empresa petrolera con contratos vigentes por más de 151 millones de dólares con el Gobierno de México.
Tras vivir en la mansión del directivo de Baker Hughes, López Beltrán se mudó a una residencia nueva en el condado de Harris, que está a nombre de su pareja, Carolyn Adams, según MCCI. Además, el hijo del Presidente viajaría en un automóvil de lujo, valorado en 68 mil 675 dólares, a nombre de su esposa.
La primera residencia que López Beltrán y Adams ocuparon, entre 2019 y 2020, pertenecía a Keith L. Schilling, de Baker Hughes, que en agosto de 2019 firmó en Villahermosa, Tabasco, un contrato de Pemex por 85 millones de dólares, documenta MCCI.
Ante tal situación, el Presidente informó el martes 1 de febrero en su conferencia diaria que “está abierta una investigación contra mi hijo”.
“Nada más decir que en este Gobierno no tienen influencia mis hijos. No se le da contrato a ningún recomendado. En el asunto del matrimonio, pues ahí está complicado meterse. Ellos se casaron y al parecer la señora [Carolyn Adams] tiene dinero, pero no tiene nada que ver con el Gobierno. Ni un contrato, ni una recomendación. No somos iguales”, subrayó.