Tailandia dio un paso más el martes hacia la despenalización de la marihuana cuando el ministro de Salud firmó una medida que elimina oficialmente el cannabis de la lista de drogas controladas.
Ninguna nación asiática ha tomado hasta el momento una medida similar.
La medida significa que se pueden utilizar todas las partes del cannabis, incluidas las flores y semillas. Sin embargo, el extracto seguirá siendo ilegal si contiene más del 0,2% del ingrediente psicoactivo que produce el efecto de la droga, el tetrahidrocannabinol, o THC.
En la ceremonia de la firma, el ministro de Salud, Anutin Charnvirakul, dijo que esperaba iniciar una “nueva historia del cannabis” en Tailandia y eliminar el estigma que lo rodea.
“El cannabis tiene muchos beneficios medicinales, al igual que otras hierbas, y haremos todo lo posible para que el pueblo tailandés disfrute de los beneficios tanto medicinales como económicos”, dijo Anutin.
La producción, venta y posesión de cannabis seguirá estando regulada parcialmente, lo cual significa que el consumo recreativo de la marihuana aún no es legal. El ministerio ha declarado que su propósito es promover el consumo del cannabis con fines medicinales y crear una industria de los productos derivados.
Desde 2020, Tailandia es la primera nación asiática que permite la producción y el consumo del cannabis con fines medicinales bajo controles estrictos. El partido Bhumjai Thai de Anutin, socio mayor del actual gobierno de coalición, hizo campaña por la legalización del cultivo del cannabis como ayuda a los agricultores.
La nueva medida entrará en vigor 120 días después de su publicación en la gaceta oficial. En ese período, el ministerio tratará de que el Parlamento apruebe un proyecto sobre el cannabis para aclarar varias cuestiones legales.