Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, abandonó Taiwán este miércoles tras una visita que ‘enfureció’ al Gobierno de China, quien anunció que se tomarán medidas con una naturaleza “contundente y efectiva”.
El avión, que transporta a Pelosi, despegó a las 18:01 horas de la localidad del aeropuerto Songshan de Taipéi, después de una visita en la que la funcionaria prometió que “Estados Unidos no abandonará a Taiwán”.
La veterana portavoz avisó que las fuerzas estadounidenses y las que “apoyan la independencia” de Taiwán “notarán las medidas” de China.
También señaló que Pelosi “intenta confabularse con las fuerzas separatistas taiwanesas” para “violar la soberanía y la integridad territorial de China”.
Además, Hua criticó a la funcionaria por “provocaciones” previas “que acabaron suponiendo vergüenza” para Estados Unidos, entre las que citó declaraciones hechas por Pelosi durante las protestas antigubernamentales a gran escala registradas en Hong Kong en 2019, que la política describió como “una escena maravillosa” pero que Hua recordó que “fueron el comienzo de la transición de Hong Kong del caos a la estabilidad”.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores chino, Wang Yi, calificó hoy de “completa farsa” el viaje de Pelosi y advirtió que “quien ofenda a China será castigado”.
Wang también acusó a EU de “violar la soberanía de China bajo el disfraz de la democracia” y avisó que aunque Taiwán se apoye en el poder de Washington “no cambiará el consenso internacional de que solo existe una China en el mundo” ni se revertirá “la histórica tendencia a la reunificación entre la China continental y Taiwán”.
En ese sentido, la Cancillería china convocó anoche al embajador de Estados Unidos en el país asiático, Nicholas Burns, en protesta por la presencia de Pelosi en Taiwán.
“Difícil imaginar una acción más temeraria y provocadora (que la visita de Pelosi) y habrá consecuencias desastrosas si Estados Unidos se equivoca en su juicio.”, advirtió la portavoz de la Cancillería china.
En las últimas horas, Pekín ha respondido al viaje, al que calificó como una “deplorable traición” por parte de EU, con un despliegue militar en el Estrecho de Taiwán y con sanciones económicas a las importaciones de productos procedentes de la isla.
Pelosi ‘desafía’ a China
Pelosi, tercera autoridad de EU y segunda en la línea de sucesión a la Casa Blanca, visitó esta mañana el Parlamento taiwanés y posteriormente se reunió con la presidenta de la isla, Tsai Ing-wen, quien le impuso una condecoración por su “apoyo” al territorio.
Antes de montar en el avión y continuar su gira, la política mandó un mensaje en su cuenta de Twitter:
“Que nadie se equivoque. El compromiso de Estados Unidos con el pueblo de Taiwán permanecerá inalterable ahora y en las próximas décadas”.
Pelosi pasó menos de 24 horas en la isla y, tras su encuentro con Tsai Ing-wen, declaró que Taiwán, a la que describió como un “modelo para la región”, es un “contraste” con China, al tiempo que elogió el “éxito del pueblo taiwanés y su valentía para convertirse en un país más democrático”.
Por la tarde, la funcionaria se reunió en la capital taiwanesa con activistas por los derechos humanos entre los que se encontraba Wuer Kaixi, uno de los líderes del movimiento estudiantil que protagonizó las protestas en la plaza pequinesa de Tiananmen, reprimidas por China en 1989.
Taiwán es uno de los principales motivos del conflicto entre China y EU debido sobre todo a que Washington es el principal suministrador de armas de la isla y sería su mayor aliado militar en caso de conflicto bélico con el gigante asiático.
El Acta de Relaciones de Taiwán de 1979 no garantiza que Estados Unidos vaya a intervenir militarmente si la República Popular China atacase la isla, pero tampoco lo descarta.
China insiste en “reunificar” la República Popular con la isla, que se gobierna de manera autónoma desde que los nacionalistas del Kuomintang (KMT) se replegaran allí en 1949 tras perder la guerra civil contra los comunistas y continuaran con el régimen de la República de China, que culminó con la transición a la democracia en la década de 1990.
Con información de: Radio Fórmula