Por vandalismo, comienza el deterioro de los locales comerciales de la Avenida Venustiano Carranza que se encuentran desocupados.
Su destrucción es una consecuencia del cierre y descuido de 76 comercios diversos en general y de 115 oficinas.
Poco a poco aumenta la incidencia de fincas que sufren vandalismo y van desde casas antiguas hasta locales comerciales, en los cuales por igual hay daños en superficies de material que en las de vidrio, además de puertas y cortinas de metal, herrería forjada y portones además de ventanales de madera.
En el número 749 de Carranza, un local que ha alojado negocios de pescados y mariscos, de carnitas, restaurantes de carnes finas y otros usos diversos, registra vidrios rotos y la colocación de piezas improvisadas para evitar que se metan los ladrones.
Para el caso de Carranza 772, una casa antigua, se encuentra en venta. Fue vivienda y ahora está abandonada y presenta huellas de deterioro e incluso desprendimiento de puertas. El salitre va consumiendo los muros y hay un marcado desgaste en la marquesina de cantera.
En algunas fincas ya se encuentra solamente la base del medidor de luz y se aprecian algunos cables rotos, huellas de que fueron extraídos.
En los patios de algunas casas abandonadas, se aprecia la hierba crecida, producto del abandono.
De la casa abandonada en la esquina de la avenida Venustiano Carranza y la calle Francisco Eduardo Tresguerras, el deterioro avanza todos los días. Recibe visitas de indigentes, drogadictos, ladrones y hasta de curiosos.
Con información de: El Pulso