Residentes y estudiantes de postgrado de la especialidad de Imagenología Diagnóstica y Terapéutica avalada por la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), presentaron una queja formal por problemas de acoso, discriminación y agresividad suscitados en el servicio de Radiología e Imagen del Hospital Central “Dr. Ignacio Morones Prieto” a cargo de Alejandro Hernández Martínez, jefe de servicio y profesor titular de la especialidad.
Los afectados Elvira Guadalupe García Leija, Francisco Iván Jara García, Hugo Salvador Solís Delgado y Francisco Esteban Hernández Juárez, quienes presentaron las quejas ante Defensoría de Derechos Universitarios, la División de Servicios Estudiantiles, la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) y Conapred, por afectar su integridad personal y como médicos residentes, además que entre los afectados hay una persona sordomuda estudiante de otro estado.
El quejoso Francisco Iván Jara García narró que, en enero de este año se agravó la problemática cuando le gritó, por causa de que los pacientes no tenían el material necesario para ser operados, pese a que ese no es su trabajo ni responsabilidad, pues le dijo: “es que ese es el pinche problema contigo Jara, no quieres hacer tu trabajo, me enferma tu falta de actitud, estoy hasta la madre de ti, todo el servicio te detesta, eres detestable para el servicio, tienes problemas personales con todos tus médicos, conmigo, con todos tus coerres, con todos tus “RS” menos y tus “RS” mas, tienes problemas con María Elena, los técnicos, con Betty y con los pacientes, María Elena me ha pedido que te corra cuatro veces y te he defendido”.
Agregó que, además lo amenazó: “de mi cuenta corre que te corran de la residencia o te cancelen tu rotación en España, de mi cuenta corre porque esto ya es personal conmigo y con los demás”. Inmediatamente fue a solicitar una cita con Juan Manuel López Quijano, subdirector de Educación e Investigación en Salud, para manifestarle lo ocurrido, pero se pudo del lado de Alejandro Hernández.
El afectado, Hugo Salvador Solís Delgado, relató que, desde su entrevista con Hernández Martínez hubo problemas, pues le dijo: “y tú, ¿por qué estás aquí?, ¿por lástima?, ¿cómo estudiaste medicina y cómo planeas hacer la residencia si eres sordo?, a lo que respondió: “Me he adaptado con ayuda de la app de transcripción, con el micrófono de mi aparato auditivo y mi iPhone”, pero se mostró escéptico y le dijo textualmente: “tú no deberías de estar aquí”.
Añadió que, desde el inicio de su residencia médica, ha sido segregado en innumerables ocasiones de las distintas áreas de trabajo del servicio de radiología, siendo testigo y teniendo conocimiento de esto Hernández Martínez, “quien en lugar de brindarme su apoyo se ha comportado de manera altanera, grosera y discriminatoria como se previamente se narró.
Un ejemplo de esto es que iniciando el año académico 2022, mientras cubría la semana de ultrasonido con el Dr. Daniel Sandoval Guerra, residente de tercer año, fui ignorado los 5 días de la semana y por lo tanto no tuve la posibilidad de realizar ningún ultrasonido, afectando mi desarrollo y estado de ánimo”.
La quejosa, Elvira Guadalupe García Leija manifestó que, se negó a firmarle una rotación en el mes de noviembre, pese a que ya habían pactado porque esa cuando podía realizarlos, además que le ha propuesto hacer mal uso de su jerarquía con sus compañeros residentes de menor grado para afectarlos laboral y emocionalmente su integridad.
“El viernes 16 de diciembre de 2022, yo estaba en el ultrasonido terminando los estudios pendientes del día (…) le mandé mensaje al Dr. Alejandro Hernández, para avisar que ya no había más ultrasonidos pendientes, a lo que me responde: “porque no te has ido? se iban a ir temprano”, yo respondí: “pues estaba con ellos”, él me respondió, cito textualmente: “huevonazos, ves porque hay que maltratarlos, chángatelos ahora sí”.
El residente, Francisco Esteban Hernández Juárez, dijo que el 25 de octubre del año pasado, a él y a todos los residentes los encerró en la sala de juntas, donde les grito: “van a entender por las malas, hasta donde tope, les voy a hacer la vida imposible, se van a quedar sin rotaciones”, supuesta mente porque le llegaron quejas, pero no los dejaba explicar.
Agregan que Alejandro Hernández ha hecho comentarios despectivos hasta de pacientes, como fue en un ultrasonido pélvico de una paciente femenina, donde expresó despectivamente y en tono burlón: “A ésta le dieron hasta por donde no” y contra residentes hace cometarios como: “¿dónde estás? puta madre, ya saben que deben de estar aquí, me lleva la chingada, siempre es lo mismo con ustedes”.
Con información de: Potosí Noticias