Después de colocar una manta para exigir justicia, padres de familia de nueve menores del Centro de Atención Infantil (CAI) # 1, que fueron víctimas de abuso sexual, denunciaron que, personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) que llevaba el caso, les pidió recursos económicos para poder avanzar con las investigaciones.
Las familias se negaron y les señalaron que ya están pagando la asesoría legal, ya que incluso uno de los primeros abogados que les atendió el caso “nada más nos sacó dinero”, otra abogada no quiso tomar el caso y ahora ya van por el tercer abogado.
“Queremos bloquear -calles o manifestarnos- para que en Fiscalía nos hagan caso, imagínate los policías querían dinero”, expresó una de las denunciantes, quien abundó que incluso las bloquearon de WhatApp para que no les siguieran preguntando por avances en las carpetas de investigación.
Después de que, se hizo pública la denuncia, los policías de investigación finalmente se comunicaron con las denunciantes, expresándoles que ya estarían avanzando en las investigaciones, pero que por el momento se encontraban de vacaciones.
Además, de parte de la FGE les señalan que no han podido localizar al presunto agresor de nombre Arturo, pese a que las familias reciben fotografías del señalado en reuniones sociales, “se la pasa de fiesta cada fin de semana”.
Por parte de la Fiscalía Especializada para la Atención de la Mujer, la Familia, y Delitos Sexuales, ya se les realizaron las pruebas psicologías a los niños, y tomaron sus declaraciones, que de acuerdo con las familias todas coinciden.
La manda se colocó en un puente peatonal de la capital potosina, donde se puede leer: “Justicia para los niños, abuso sexual infantil en el CAI #1”.
Con información de: Potosí Noticias