Un tribunal ruso condenó el viernes a Evan Gershkovich, un periodista de The Wall Street Journal, a 16 años en prisión en una colonia penal de alta seguridad, poniendo fin a su juicio por espionaje pero posiblemente abriendo una vía para un intercambio de prisioneros entre Estados Unidos y Rusia.
La severa sentencia representa la primera condena por espionaje de un periodista occidental en la Rusia moderna. Pero el carácter acelerado del caso sugiere que Moscú podría estar dispuesta a intercambiar a Gershkovich.
El tribunal dijo en un comunicado que Gershkovich no admitió su culpabilidad, pero dijo que “la totalidad de las pruebas presentadas ante el tribunal fueron suficientes para emitir un veredicto de culpabilidad”. El juez Andrei Mineev, quien presidió el caso, condenó a Gershkovich a dos años menos de lo que pedían los fiscales.
Dow Jones, la empresa matriz de The Wall Street Journal, calificó la condena de “vergonzosa” y una “farsa”. La empresa añadió en un comunicado que “seguiremos haciendo todo lo posible para exigir la liberación de Evan y apoyar a su familia”.
El proceso se adelantó más de tres semanas recientemente, y el tribunal concluyó el caso, un proceso que suele durar meses, en tan solo tres audiencias, lo que indica que el Estado ruso se está moviendo con una rapidez inusual.
El miércoles, el ministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergei Lavrov, declaró que ambos países estaban manteniendo conversaciones sobre un posible intercambio en el que estaría implicado Gershkovich, quien fue detenido hace casi 16 meses. Es el primer reportero occidental detenido en Rusia acusado de espionaje desde la Guerra Fría.
Funcionarios rusos han dicho que se estaban manteniendo conversaciones discretas con Estados Unidos sobre Gershkovich, pero que cualquier intercambio de prisioneros se produciría solo después de que se dictara la sentencia.
El viernes, Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, dijo que no haría comentarios sobre por qué se había acelerado el juicio de Gershkovich y sobre si pronto habría un intercambio, según Tass, una agencia de noticias estatal rusa.
Gershkovich, su empleador y el gobierno estadounidense han negado repetidamente los cargos de espionaje contra él, diciendo que estaba acreditado para trabajar como corresponsal extranjero en Rusia y que se dedicaba al periodismo, no al espionaje. Han calificado a los cargos como motivados políticamente.
El tribunal de Ekaterimburgo, donde Gershkovich fue detenido inicialmente mientras realizaba un reportaje, declaró a primera hora del viernes que había concluido el análisis de las pruebas, incluidos los testimonios de los testigos y la declaración de Gershkovich, quien también fue interrogado como testigo.
Los fiscales rusos afirmaron en su acusación que Gershkovich utilizó “meticulosos métodos conspirativos” para obtener “información secreta” sobre una importante fábrica de armas rusa situada a unos 120 kilómetros al norte de Ekaterimburgo.
La publicación de la acusación el mes pasado fue la primera vez que el Estado ruso reveló detalles sobre el caso contra Gershkovich, pero no aportó ninguna prueba que respaldara la acusación.
Los procedimientos del viernes, cuando ambas partes presentaron sus argumentos finales, se celebraron a puerta cerrada. A los periodistas que acudieron al edificio del tribunal regional de Ekaterimburgo, a unos 1448 kilómetros al este de Moscú, no se les permitió ver a Gershkovich en la sala del juzgado ni siquiera antes de que comenzara la audiencia.
El proceso contra Gershkovich se aceleró el martes, cuando se anunció que la segunda audiencia de su caso se había adelantado más de tres semanas. La primera audiencia se celebró el 26 de junio.
El jueves, durante la segunda audiencia, el tribunal concluyó la investigación de las pruebas y escuchó el testimonio de los testigos.
Los casos de espionaje en Rusia suelen durar unos cuatro meses, pero pueden prolongarse hasta un año, según abogados que han trabajado en este tipo de casos.
Los abogados de Gershkovich no hicieron comentarios. Su caso está clasificado, lo que significa que la ley les prohíbe hablar públicamente sobre el proceso, bajo pena de prisión.
Yevgeny Smirnov, un abogado ruso que ha trabajado en casos similares, dijo que no recordaba ningún caso con acusaciones tan graves que hubiera sido juzgado tan rápidamente por un tribunal.
“Aquí está claro que el tribunal y el Estado han acelerado, tratando de terminar el procedimiento”, dijo Smirnov en una entrevista con el medio de comunicación Zhivoy Gvozd. “Espero que la razón sea positiva, que se haya acordado un intercambio”.
Smirnov dijo que un intercambio que involucre a Gershkovich dependería de un indulto del presidente Vladimir Putin, un paso que por definición requiere una condena. La defensa de Gershkovich podría apelar la sentencia, lo que prolongaría el proceso.
Gershkovich es uno de los varios ciudadanos estadounidenses que han sido detenidos en Rusia en los últimos años, y su caso ha suscitado temores de que el Kremlin esté tratando de utilizar a ciudadanos estadounidenses como moneda de cambio por los rusos detenidos en Occidente.
El jueves, un tribunal de Moscú condenó a Michael Travis Leake, un músico de rock estadounidense que había estado viviendo en Rusia, a 13 años en una colonia penal de alta seguridad después de que los fiscales lo acusaron de organizar una red de tráfico de drogas.
La declaración de Leake no se ha hecho pública. El tribunal también condenó a Veronika Grabanchuk, a quien identificó como su cómplice, a ocho años en una colonia penal.
Otros estadounidenses detenidos en Rusia son Paul Whelan, un veterano de los Marines; Alsu Kurmasheva, una editora que trabaja para Radio Free Europe/Radio Liberty; y Marc Fogel, un profesor de la Anglo-American School de Moscú, quien en 2022 fue condenado a 14 años en una colonia penal por contrabando de drogas.
En junio, un tribunal rusocondenó a Yuri Malev, quien posee tanto la ciudadanía estadounidense como la rusa, a tres años y medio en una colonia penal tras criticar a Rusia, sus dirigentes y su guerra en Ucrania en las redes sociales.
Con información de The New York Times en Español