Una familia de 15 integrantes acudió a una celebración de cumpleaños sin imaginar que se contagiarían de COVID-19. Pese a seguir las medidas de prevención, tres días después del festejo comenzaron a presentar síntomas.
Quince personas dieron positivo a COVID-19. Como factor en común tenían el haber asistido a una fiesta de cumpleaños en familia y, ahora todos están infectados.
Los hechos sucedieron en Texas. Allí una mujer identificada como Enriqueta Aragonez dio a conocer que ella y sus familiares se vieron afectados por el virus de SARS-CoV-2. Debido a que la enfermedad la afectó más, esta mujer tuvo que ser trasladada de urgencia en el hospital.
Tres días después del festejo de un sobrino, la mayoría de los familiares presentó síntomas como dolores corporales, fatiga, migrañas, perdida del sentido del olfato y del gusto, además de fiebre.
Enriqueta, a diferencia de su familia, tosió sangre y presentó afecciones en el corazón. Después de ser trasladada al médico, se mantuvo una semana internada y finalmente regresó a su hogar en mejores condiciones.
A través de un video compartido por medios locales, con la aprobación de la familia, los quince infectados contaron su experiencia buscando que la gente tome mayor consciencia sobre la gravedad del COVID-19.
De acuerdo con las declaraciones de la hija de Enriqueta, “un momento de descuido le ha costado un mes de paz a la familia”, pues no pueden dormir ni administrar de forma correcta sus ingresos debido a los constantes gastos que requiere el SARS-CoV-2.
Los Aragonez siguieron las medidas preventivas recomendadas como el uso de cubrebocas, desinfectante y gel, además de mantener un confinamiento desde los primeros meses de la pandemia. Por desgracia se olvidaron del distanciamiento social y en la reunión bajaron la guardia para partir el pastel.
Con información de Televisa