Si la media de vida de tus prendas es un año, créenos, algo estás haciendo mal.
Gastas grandes cantidades de dinero en tus prendas favoritas, así que evita estos errores al guardar o colgar ropa para prolongar su vida útil. Termina, de una vez por todas, con estos malos -y demasiado comunes- hábitos de almacenamiento.
- Estás utilizando los ganchos incorrectos
No todos las ganchos son iguales. Un gancho que sea del tamaño, la forma o el material incorrecto puede dañar tu ropa, así que hazte un favor e invierte en unos que sean de alta calidad y que se adapten a las necesidades de tu guardarropa. Escoge de varios tamaños: los que son demasiado pequeños fomentan las arrugas y los que son muy grandes, crean esas temidas burbujas en los hombros. Mantén los artículos delicados como tus camisas en ganchos de fieltro y antideslizantes, los abrigos en ganchos de madera y los trajes en ganchos especializados de esta prenda. Este es un truco básico que cuidará muy bien tu traje. Ojo, ¡destierra los de metal! Son demasiado endebles y demasiado resbaladizos. - Estás colgando tus suéteres y tus prendas de punto
Por más tentador que sea, evita colgar tus prendas de punto pesadas. Lo más probable es que tu suéter de lana o cachemira se deforme cuanto más tiempo permanezca en un gancho. Considera doblar y guardar los suéteres en tus cajones. - Doblar tus pantalones por la mitad y luego colgarlos
Las tintorerías y sastres profesionales tienen un truco especial: invertir en ganchos con clips forrados de fieltro para luego colgarlos verticalmente por la cintura o el dobladillo. ¿Estarías dispuesto a comprarte unos para colgar tus jeans favoritos?
Errores al doblar o guardar ropa camisas y ropa doblada apliada una encima de otra colores
- Apilar tus playeras y camisas en cajones en lugar de guardarlas
Cuando la experta en organización Marie Kondo publicó su libro “The Life-Changing Magic of Tidying Up”, muchos de nosotros nos sorprendimos al darnos cuenta de que hemos estado doblando nuestras camisas de manera incorrecta durante toda nuestras vidas. De acuerdo con el método Konmari de Kondo, la ropa debe doblarse y almacenarse verticalmente en filas, como si fuera un archivero, en lugar de apilarse una encima de la otra. Este método de Marie Kondo no solo te permite ver todo el contenido de tu cajón a la vez, sino que también ahorra espacio y evita las arrugas. - Atiborrar tus cajones
Aventar la ropa en tu cuarto en lugar de doblar todo cuidadosamente crea algo más que una monstruosidad.Hacer una bola gigante con la ropa también puede debilitar las telas y que orille a que tus prendas acaben en la pila de donaciones mucho más rápido. - Guardar las prendas de invierno sin haberlas limpiado antes
De los errores al guardar o colgar ropa, este es uno de lo más usuales. Las chaquetas y los abrigos tienen mucho uso durante el invierno. Es lo más seguro que al final de la temporada, absorbieron la suciedad, el humo y básicamente todo con lo que estuviste en contacto, además de la suciedad y el sudor de tu propio cuerpo. Guardar la ropa de invierno sucia en la parte de atrás de tu armario o debajo de la cama es más que insalubre: permite que las manchas se asienten e incluso puede debilitar y desteñir las telas. Por lo tanto, revisa la etiqueta de cuidado para ver si necesitas lavar a máquina, lavar a mano o limpiar en seco tus prendas para el frío. Cuando saques tus abrigos del armario un año después, todo tendrá sentido. - Guardar la ropa recién sacada de la tintorería en los ganchos de alambre y la bolsa de plástico
Es tentador, lo sabemos pero tus prendas no están destinadas a vivir dentro de una sofocante prisión de plástico, donde la tela puede debilitarse e incluso decolorarse por los productos químicos que desprende el plástico. Con el tiempo, la humedad atrapada dentro del plástico puede incluso fomentar el moho.
Con información de GQ